La Asociación de Importadores de Mercancías Perecederas del Puerto de Algeciras (AIMPA) baraja la posibilidad de convocar una huelga inmediata y manifestarse ante las instalaciones del Puesto de Control Fronterizo (PCF), ante lo que consideran, está siendo un reiterado incumplimiento de los servicios.
Los transitarios y consignatarios que operan junto a este colectivo, consideran que después de más de 30 años operando en este puerto con muchos más camiones que hoy en día y con tan sólo dos inspectores para atender el servicios, hasta que se amplió la plantilla a 4 posteriormente a 6, nunca a habido los problemas actuales ya que, hasta Aduana priorizaba a este tipo de mercancías, colaborando con un Despacho Previo a la Importación (DPI) de cara a liberar estos tráficos en horas. AIMPA se queja de que, ahora son 22 inspectores veterinarios los que prestan servicio en este PCF y no da tiempo a inspeccionar estos tráficos en el día, a pesar de que así se prometía cuando se restringio el servicio 24 horas para terminar a las 00:00 horas.
AIMPA insiste en que antes se priorizaba el producto perecedero (pescado y crustáceos Frescos o vivos), pero hoy en día no es así y el trafico llegado al puerto algecireño, sobre las 19:00 y 20:00 horas, a pesar de cumplir con creces los requisitos exigidos, quedan bloqueados sin ser atendidos hasta el día siguiente.
AIMPA se pregunta: ¿A qué puerta pueden tocar? Para que se les amiga, por lo que, entre otras acciones, va a solicitar una reunión con el sindicato Coordinadora TPA para que les asesore y busque las acciones legales a llevar a cabo, si fuere necesario, al entender que “los Inspectores veterinarios pueden estar sufriendo algún agravio en el desarrollo de sus funciones y que éstas, están afectando a las inspecciones, siendo los empresarios los que sufran los daños colaterales”.
AIMPA califica la situación como “desesperante” y desconoce las causas de los bloqueos y la falta de servicios, por lo que pide una respuesta de la Administración central y la APBA, ante las cuantiosas pérdidas que esta situación está generando a los importadores que operan en el puerto algecireño.