El Puerto de Barcelona ha batido el récord absoluto de tráfico total de mercancías en un primer semestre con un movimiento de 36,3 millones de toneladas. Este dato supone un incremento del 11% con respecto al tráfico total del primer semestre de 2021. El récord anterior se había alcanzado en el año 2019, antes de la pandemia, con un tráfico que llegó a los 34,5 millones de toneladas y que este año se ha superado en un 6%.
Eso ha sido posible porque todos los tráficos principales, a excepción de los vehículos, han cerrado este periodo de seis meses en positivo. «Es una buena noticia que indica que las empresas de nuestro hinterland trabajan bien y de lo lindo para recuperar los niveles pre-pandemia», ha remarcado el presidente del Puerto de Barcelona, Damià Calvet, en la rueda de prensa de resultados celebrada hoy.
Al récord alcanzado por el tráfico total se añade otra marca importante, en este caso la registrada por el tráfico de contenedores que también ha sido el mejor en un primer semestre. En este caso, entre enero y junio ha pasado por el Puerto de Barcelona 1,8 millones de TEU, con un crecimiento del 0,7%. El anterior récord eran los 1,7 millones de TEU movidos ahora hace un año.
El director general del Puerto de Barcelona, José Alberto Carbonell, ha remarcado que el tráfico total no sólo está por encima del movimiento de 2021, «sino que también crece comparado con el año 2019 (+6%) lo que indica que hay una clara recuperación completa en este inicio de año». Carbonell ha puesto de relieve «el buen comportamiento que están teniendo tanto las importaciones, que crecen un 11%, como los tráficos, que registran un incremento del 7%. Las exportaciones, sin embargo, están un 6% por debajo de los registros de 2021».
El tráfico de hinterland, es decir, el tráfico de mercancías de exportación y de importación, ha tenido un comportamiento muy similar al del tráfico total, con 17,7 millones de toneladas manipuladas y un incremento del 7,9%. Con respecto al tráfico ro-ro, se ha registrado un movimiento de 215.000 UTI, con un alza del 12,5%.
En relación a los sólidos a granel, el Port de Barcelona ha cerrado los seis primeros meses del año con un movimiento de 2,34 millones de toneladas y eso sitúa estos tráficos un 3,2% por encima del mismo periodo de 2021. Este repunte al alza ha sido posible, principalmente, por la subida de las exportaciones de potasas (138%) en la terminal de ICL. También el tráfico de cereales y harinas registra un buen resultado, creciendo un 65,9%.
Los líquidos a granel se disparan
En el grupo de los líquidos a granel, el movimiento alcanzado ha sido prácticamente de 7,9 millones de toneladas, cifra que supone un notable incremento del 42,8%. La causa de este crecimiento se encuentra principalmente en el fuerte crecimiento que mantienen las importaciones de GNL (+83%) y los tráficos, principalmente de gasolina (+178%), seguidas por los biocombustibles (+94%). El aumento de los tráficos, tanto las salidas como las entradas, denota un fuerte dinamismo en las operaciones de distribución de estos productos.
El único segmento que no aumenta es el tráfico de vehículos nuevos, afectado por el actual contexto de incertidumbre y crisis económica derivada de la pandemia, que registra una caída del 13%. Aun así, en las últimas semanas se empieza a notar un cambio de tendencia y junio se convierte en el primer mes con este tráfico en positivo, de la misma manera que está pasando este julio.
Con respecto al tráfico de pasajeros en el Puerto de Barcelona, entre enero y junio ha sumado cerca de 1,2 millones de personas. Eso es un 393,4% más que un año antes, aunque las cifras todavía quedan lejos de los datos pre-pandemia, concretamente, un 37% por debajo del primer semestre de 2019 (1,87 millones de pasajeros). La recuperación de los ferris ha sido más acelerada y ya se encuentran sólo un 8,6% por debajo de los tráficos del primer semestre de 2019. En el caso de los cruceros, els 670.000 pasajeros representan un 47,5% menos que el 1,3 millones del año 2019.