La flota andaluza de buques congeladores de pesca de marisco ha celebrado la II Jornada de Formación, Concienciación y Aplicación de las Normas Sanitarias a bordo, con el objetivo de seguir mejorando y actualizar los conocimientos sanitarios de los tripulantes, la cumplimentación adecuada de los registros documentales e impulsar el desarrollo óptimo de las inspecciones sanitarias del marisco a bordo.
La formación, que se ha realizado en coordinación con el Servicio de Seguridad Alimentaria de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía, ha sido impartida por los propios miembros del equipo de Inspección de Buques, encargado de las visitas sanitarias en los puertos africanos y las inspecciones documentales a los buques.
En la jornada se ha tratado el proceso de manipulación de los alimentos, el sistema de autocontrol, el Análisis de Peligros y Puntos de Control Críticos (APPCC); en definitiva, la seguridad alimentaria y trazabilidad de los productos del mar, y específicamente del marisco, objetivo de la actividad de la Asociación Nacional de Armadores de Buques Congeladores de Pesca de Marisco (ANAMAR), asociada a CEPESCA.
Igualmente, se ha confirmado el correcto cumplimiento de la normativa higiénico-sanitaria en todas y cada una de las labores de pesca en los 52 buques que faenan en los caladeros de Angola –donde las especies objetivo son gamba, alistado y cangrejo–, Mauritania, Guinea Bissau, Senegal y Congo. En estos buques, personal cualificado limpia, clasifica y congela el marisco para, posteriormente, evitando romper la cadena del frío, almacenarlo en cámaras de congelación a una temperatura entre -25° y -30° durante un período aproximado de 40/50 días.
Al término de la marea, los pesqueros transbordan sus capturas, sin interrumpir la cadena de frío, al mercante que transporta el marisco capturado a los puertos andaluces para su posterior venta en subasta pública y distribución.
Según Francisco Guil Arreciado, responsable del Departamento de Estructuras de ANAMAR, “con esta segunda jornada seguimos mejorando la formación de los profesionales de las empresas armadoras, que es la base para concienciar y asegurar el cumplimiento de la normativa y la aplicación de las mejoras prácticas en la manipulación del marisco”.