La gestión de la Autoridad Portuaria de Motril en materia de sostenibilidad medioambiental está teniendo su reflejo en el ámbito de las empresas privadas que trabajan en sus instalaciones, como en el caso de Transportes Sabio que, tras su adaptación a la normativa Euro6 que establece que los vehículos pesados de más de 3.500 kilogramos deben limitar su emisión de gases a la atmósfera, cuenta con una flota de camiones diésel totalmente ecológica.
“Contamos con una veintena de camiones, con una antigüedad media de tres años, totalmente respetuosos con el medio ambiente. La idea es continuar esa línea reemplazando periódicamente dos cabezas tractoras con la tecnología ecológica de vanguardia que exista en cada momento”, ha indicado el propietario de la empresa, Antonio Sabio, que también se ha referido a la modernización de los semirremolques, y que “al estar fabricados con un material más ligero repercute en el ahorro de combustible y, por tanto, en una menor contaminación”.
Transportes Sabio genera una veintena de empleos y en épocas puntuales, según la demanda para la importación y exportación en el puerto, se recurre a camioneros autónomos externos.
El presidente de la Autoridad Portuaria, José García Fuentes, ha subrayado “la apuesta por el empleo y el esfuerzo inversor de la empresa para alcanzar mayores cotas de sostenibilidad en el transporte, cada vez mejor valorado y más apreciado por los clientes”.
Transportes Sabio se fundó en 1928 para cubrir las necesidades de la logística del Puerto de Motril y de la industria situada en su hinterland o área de influencia, está especializada en el transporte de “grandes volúmenes en poco tiempo” de todo tipo de graneles sólidos, principalmente minerales que se extraen de las canteras de la provincia para la exportación, fertilizantes, cereales, mercancía paletizada, pasta de papel y madera, entre otras mercancías.
Energías limpias
García Fuentes ha recordado la apuesta de su gestión como presidente “por las nuevas energías limpias en el campo empresarial y turístico”. En ese sentido, ha destacado el trabajo para la electrificación de todos los motores de la maquinaria que opera dentro del recinto portuario para conseguir la descarbonización y, por tanto, la eliminación de emisiones contaminantes a la atmósfera, así como edificaciones sostenibles, autosuficientes energéticamente e inteligentes, como el futuro edificio de la Guardia Civil o la Lonja Pesquera. Otro de los proyectos es la creación de una gran superficie de 40.000 metros cuadrados para la generación de electricidad fotovoltaica en la nueva zona de preembarques.
La optimización de los recursos es otra de las premisas de la dársena motrileña como así ha ocurrido con la reciente construcción de un aljibe que recoge el agua de lluvia y su reutilización para el riego de los jardines.