El grupo Ecologistas en Acción lanzaba, en las últimas horas, la voz de aviso sobre la llegada al puerto de Sevilla de dos barcos procedentes de Montenegro, cuya carga total es de 12.000 toneladas de residuos tóxicos que irán a parar al vertedero de Nerva (Huelva).
En principio, está previsto que el primero de los buques llegue este lunes 31 el puerto sevillano con 5.000 toneladas de dichos residuos y posteriormente, el 3 de febrero, llegará el segundo con unas 9.000 toneladas a granel. El traslado cuenta con la autorización de la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio para la Transición Ecológica y el reto Demográfico y, supuestamente, el previo consentimiento de la Junta de Andalucía.
Según los conservacionistas, con esta actividad se da continuidad al traslado de un total de 110.000 toneladas de ecotóxicos provenientes del desmantelamiento del astillero del pueblo montenegrino de Bijela. De ese total, ya fueron enterradas en Nerva durante 2019 cerca de 40.000 toneladas de residuos clasificados como aceites minerales de mecanizado que contienen halógenos, sustancia peligrosa con código de la Lista Europea de Residuos LER número 12 01 06* y código A1020, según el Convenio de Basilea, que regula el transporte de residuos peligrosos entre países, por lo cual contienen antimonio, berilio, cadmio, plomo selenio y teluro.
Los ecologistas aseguran que el Gobierno español no autorizó inicialmente la importación de las 70.000 toneladas restantes pero, con el consentimiento de la Junta de Andalucía, acabó autorizando en la primavera de 2021 que se traigan y entierren en el vertedero que está situado a 800 metros del pueblo onubense de Nerva: 30.000 nuevas toneladas de las mismas características a las ya enterradas en 2019, y otras 40.000 toneladas de tierra y piedras que contienen sustancias peligrosas (código LER 17 05 03*), a las que en el Convenio de Basilea les corresponde el código A3180, es decir, sustancias contaminadas con bifenilo policlorado (PCB), terfenilo policlorado (PCT), naftaleno policlorado (PCN) o bifenilo polibromado (PBB).
Ante esta situación, Ecologistas en Acción ha pedido al Gobierno el control e inspección de la trazabilidad del traslado y vertido de residuos peligrosos desde Montenegro a Nerva y se han dirigido al Defensor del Pueblo, solicitando que investigue las circunstancias de la concesión de permisos del traslado, desde Montenegro, de un total de 70.000 toneladas tóxicas más, autorizadas por la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.