Una alianza de organizaciones pesqueras de 14 países de la UE que representan a más de 22.000 pescadores y 8.000 embarcaciones, ha reunido esta semana con el Comisario de Pesca, Océanos y Medio Ambiente, Virginijus Sinkevicius, para manifestarle la importancia y las realidades de las actividades de pesca de fondo en toda Europa.
La reunión fue solicitada por la industria pesquera debido a la percepción negativa expresada por la Comisión Europea hacia ciertos artes de fondo en el contexto del Plan de Acción que la CE está desarrollando para proteger aún más los recursos pesqueros y los ecosistemas marinos en el marco de la Estrategia de Biodiversidad 2030 de la UE. La industria mostró la sostenibilidad y la importancia general de estos métodos de pesca en todos los estados miembros de la UE y demostró que estas pesquerías están bien reguladas, controladas, investigadas y ampliamente certificadas.
Los representantes de la industria de toda Europa hablaron con una única voz en la reunión destacando el papel fundamental que desempeña la pesca de fondo, tanto a pequeña como a gran escala, para garantizar la seguridad alimentaria.
El presidente de Europêche y secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), Javier Garat, convocante de la reunión con el comisario, declaró: “nuestros barcos desembarcan anualmente más de un millón de toneladas de pescado saludable y sostenible, lo que representa en torno al 25% del total de los desembarques comunitarios. El valor de los desembarques genera casi el 40% de los ingresos totales del sector, contribuyendo a la riqueza, el empleo y el tejido industrial de muchas comunidades costeras y periféricas”.
En el Plan de Acción anunciado, la Comisión Europea está considerando la introducción de limitaciones y restricciones al uso de artes de pesca de fondo
Según manifestó Gerard van Balsfoort, co-convocante de la reunión, “gracias a una gestión eficaz y basada en la ciencia, las actividades de pesca de fondo solo tienen lugar en fondos marinos limitados y de alta resiliencia, lo que minimiza el impacto en los ecosistemas y recursos marinos. Investigaciones científicas recientes lo demuestran”. En su opinión, “la dirección de la política de la Comisión sobre la pesca de fondo debe basarse en evidencia fáctica, científica y revisada por pares y evaluaciones de impacto integrales. Usar pseudociencia o afirmaciones sin fundamento, como las relacionadas con la huella de la pesca o las emisiones de carbono del sector, para construir políticas de la UE no ayudará a la salud de los océanos ni a los pescadores”.
En la reunión de Bruselas, los representantes de la industria anunciaron la creación de la “Alianza Europea de Pesca de Fondo” (EBFA)“, que representa a las flotas de pesca de fondo con sede en la UE. La alianza se lanzará el próximo mes con el objetivo de defender, apoyar y mostrar el medio ambiente, realidades económicas, sociales y culturales de las actividades pesqueras de fondo en las naciones pesqueras de la Unión Europea.
Europêche, asociación que representa a los pescadores europeos y de la que forma parte Cepesca, solicitó la reunión para hablar “en persona” con Sinkevicius, y conocer su postura real sobre el arte de arrastre, ya que de ello dependen 8.000 barcos europeos y sus tripulaciones, que representan un 11% de la flota pesquera comunitaria, el 35% de la capacidad pesquera de la UE y el 38% de los ingresos del sector.
Cabe recordar que la flota de arrastre española cuenta con 887 buques de arrastre -779 barcos de bajura-, lo que representa el 10% del conjunto de la flota pesquera de nuestro país y su actividad genera entre 250.000 y 300.000 toneladas de pescados y mariscos de un volumen total de capturas en torno a 800.000 toneladas. La pesca de arrastre supone, por tanto, más de un tercio de las capturas de la flota pesquera española, siendo el motor socioeconómico de la mayoría de los puertos pesqueros españoles.