La Armada Española lleva a cabo, hasta el próximo jueves, en un ejercicio de salvamento de submarinos denominado Cartago-21, con el objetivo de comprobar el material, los medios y los procedimientos disponibles para asistir a los supervivientes a bordo de un sumergible siniestrado hasta la llegada de los medios de rescate o el abandono y el escape del mismo. El objetivo es incrementar la preparación conjunta de las unidades de la Armada y otros organismos relacionados con la Acción del Estado en la Mar, informaron fuentes del Ministerio de Defensa en un comunicado.
Se trata de un ejercicio complejo que persigue el adiestramiento de la Fuerza Naval en la mejora de las capacidades y la preparación de la Armada para poder cumplir con sus cometidos en favor de la seguridad y la defensa, con actividades compatibles y respetuosas con el medio ambiente.
El ejercicio se divide en dos etapas, una fase simulada o ‘CPX’ (Command Post Exercise) y una fase real ‘LIVEX’ (Live Exercise). En la primera, desarrollada entre los días 9 y 10, se simuló el accidente de un submarino y las distintas reacciones operativas y logísticas que deben seguir los Estados Mayores y unidades involucradas, para la coordinación de los apoyos necesarios para el despliegue en territorio nacional de un vehículo de rescate y así poder extraer la dotación del submarino.
De igual manera, la Armada se adiestró en la comunicación a los medios de una situación de crisis como la que podría ser el siniestro de un submarino y el apoyo a los familiares de dotación.
La fase ‘LIVEX’ (con movimientos de unidades en la mar), del 9 al 16 de diciembre, sirve para comprobar la capacidad coordinada de búsqueda de un submarino, los procedimientos para prolongar la vida de los supervivientes a bordo del submarino hasta la llegada de los medios de rescate o el escape.
En estos ejercicios participan el submarino ‘Tramontana’, el buque de acción marítima (BAM) ‘Furor’, los cazaminas ‘Tambre’ y ‘Duero’, el patrullero ‘Toralla’, un equipo de la Fuerza de Guerra Naval Especial (FGNE) y equipos EOB del buque de salvamento y rescate ‘Neptuno’ y Centro de Buceo de la Armada, un helicóptero de la Quinta Escuadrilla, una aeronave del Ejército del Aire y los Estados Mayores de la Armada (Madrid), Flota (Rota), Fuerza de Acción Marítima y Flotilla de Submarinos (Cartagena), además del buque de salvamento ‘Clara Campoamor’, la salvamar ‘Draco’, la Cruz Roja y el Servicio Murciano de Salud.
El ejercicio comenzó con la activación de la boya de salvamento del submarino que dará paso a las sucesivas fases de actuación ante el siniestro de un submarino: alerta y activación de las diferentes unidades y Estados Mayores involucrados; búsqueda y localización con el despliegue de unidades navales y aéreas.
Se realizan ejercicios de supervivencia de la dotación del submarino refugiada en un compartimento de proa, un ejercicio de ventilación de la atmósfera de la cámara de refugio del submarino que permanecerá posado en el fondo, así como el suministro de material para el apoyo a la dotación.
También se practica el tratamiento masivo de bajas donde se atenderá al personal que hubiera realizado un escape del submarino afectado por diferentes cuadros médicos como consecuencia de los cambios de presión.