Navantia ha botado la quinta corbeta que está construyendo en los astilleros de Bahía de Cádiz para la Marina Real de Arabia Saudí (RSNF), que lleva el nombre de Unayzah, en homenaje a esta ciudad situada al norte de la capital del país.
El acto, celebrado en el astillero de San Fernando, contó con una lectura del Corán, seguida de la proyección de varios vídeos: sobre la ciudad de Unayzah, que da nombre al barco, sobre el programa Avante 2200 y sobre la construcción de esta quinta corbeta. El encargado de dar la bienvenida ha sido el director de Negocio de Corbetas y Buque de Acción Marítima, José Antonio Rodriguez Poch, que dio las gracias a los trabajadores por su compromiso con el programa y a los que han ultimado los preparativos para la botadura.
La ceremonia concluyó cuando el Vicealmirante Fahad Bin Abdullah Al-Ghofaily cortó la cinta, con lo que la corbeta ‘Unayzah’, tras recibir el impacto de la botella con agua de La Meca, se deslizó por la grada hasta tocar agua por primera vez. Los trabajos en la corbeta continuarán en el agua hasta su entrega en España, prevista para agosto de 2023. El buque será finalizado en Arabia Saudí y será entregado en febrero de 2024.
EL PROGRAMA AVANTE 2200
La corbeta ‘Unayzah’ es la quinta de la serie que compone el programa Avante 2200. Tiene una eslora de 104 metros, una manga de 14 y será capaz de transportar a un total de 102 personas entre tripulación y pasaje.
El diseño de las corbetas es de última generación, maximizando a la vez la participación de Navantia mediante la incorporación de productos propios, como el sistema de combate CATIZ, el sistema de comunicaciones integradas HERMESYS, la dirección de tiro DORNA, el Sistema Integrado de Control de Plataforma y el puente integrado MINERVA, junto con otros equipos desarrollados por Navantia bajo licencia, como los motores de MTU, las cajas reductoras de RENK.
Este contrato, en vigor desde noviembre de 2018, fortalece el futuro inmediato de Navantia y beneficia a todos los astilleros de la compañía y a su industria auxiliar, en especial, a toda la Bahía de Cádiz.
Supone una carga de trabajo global de alrededor de siete millones de horas que, traducido a empleo, alcanzarán la cifra de 6.000 anualmente durante los próximos 5 años. De estos, más de 1.100 serán empleados directos, más de 1.800 empleados de la Industria Auxiliar de Navantia y más de 3.000 empleados indirectos generados por otros suministradores. Más de 100 las empresas auxiliares colaboran en el programa.
El contrato incluye, además de la construcción, el Apoyo al Ciclo de Vida durante cinco años, desde la entrega del primer buque, con opción a otros cinco años adicionales.
Asimismo, incluye el suministro de varios servicios, tales como apoyo logístico integrado, adiestramiento operacional y de mantenimiento, suministro de Centros de Formación y Adiestramiento para el Sistema de Combate y Sistema de Control de Plataforma de los buques, el Apoyo al Ciclo de Vida, anteriormente citado, y los sistemas para el mantenimiento de los buques en la Base Naval de Jeddah.