La Comisión Europea ha aprobado, de conformidad con las normas de la UE sobre ayudas estatales, el plan español de 2,5 millones de euros para apoyar la compra de semirremolques de carretera intermodales aptos para su uso en ferrocarril.
El programa será financiado parcialmente por el fondo europeo de recuperación y prevé financiar con ayudas directas parte de los costes estimados para la compra de estos semirremolques intermodales, que son «significativamente más caros» que las unidades convencionales para el transporte por carretera.
El objetivo de la medida es «contribuir al desarrollo del transporte combinado por carretera y líneas ferroviarias», así como impulsar una transición hacia el segundo modo de transporte, una opción «más verde» para el traslado de mercancías.
La Comisión evaluó la medida con arreglo a las normas de la UE sobre ayudas estatales, en particular el Artículo 93 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE) relativo a la coordinación del transporte. La Comisión consideró que el plan es necesario y proporcionado para promover el uso del transporte intermodal, que es menos contaminante que el transporte por carretera y reduce la congestión de las carreteras.
Además, la Comisión Europea considera que el programa tendrá un «efecto incentivador» porque los beneficiarios de las ayudas públicas no llevarían a cabo estas inversiones en ausencia del apoyo público. Por tanto, la Comisión concluyó que la medida contribuirá a la coordinación del transporte y facilitará el cambio del transporte de mercancías de la carretera al ferrocarril en consonancia con los objetivos políticos de la UE, incluidos los establecidos en el Pacto Verde, sin falsear indebidamente la competencia en el mercado único.