La plataforma ciudadana «Salvemos Rinconcillo» contempla, con gran preocupación, cómo el temporal de viento de Levante, de las últimas horas, ha vuelto a destrozar la playa de El Rinconcillo. «La arena que tanto dinero ha costado mover regresa sin remedio a La Concha y bajo el Acceso Norte», insiste el colectivo. Como ejemplos de esta situación, el oleaje rompe ya en la base misma del cordón dunar del paraje natural de las Marismas del Palmones y en el conocido búnker.
El portavoz de la Plataforma ciudadana, José Manuel serrano, ha asegurado que «aquella imagen de principio del verano de una orilla ancha ya es otra vez un recuerdo del pasado y con la inversión pública realizada que se ha esfumado por la desprotección del litoral».
Para «Salvemos Rinconcillo», está claro que «esta es la realidad: mientras no se instalen infraestructuras fijas de protección, los temporales y la difracción lateral de las mareas ocasionada por el alargamiento del rompeolas serán un cóctel demoledor que dañará y descarnará la playa y amenazará al espacio protegido una y otra vez». «Ha quedado de manifiesto que el movimiento de arena es como colocar una tirita al enfermo grave que hoy por hoy es la playa y las Marismas del Palmones», añaden.
La plataforma ciudadana insiste en pedir a la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras y a la Demarcación de Costas de Andalucía Atlántico que no se demoren en el convenio anunciado y los pasos administrativos necesarios para la solución definitiva contra el riesgo de desaparición que sufre este patrimonio ambiental y sentimental de nuestra ciudad. Al Ayuntamiento de Algeciras le solicitan «que esté encima de este proceso y ayude en su celeridad». Para este colectivo, «la institución municipal debe tener un papel más proactivo y no limitarse a ser escenario de las reuniones que se celebren. Tiene que hacer más por la playa y la solución definitiva».
A todo esto, el estaquillado colocado por el propio Consistorio para controlar el movimiento de arenas también ha sido arrasado por el oleaje que ya está desplazando la arena en diagonal con la fuerza que es impulsada por los temporales.