El puerto de Málaga ha vuelto a acoger, este martes, al buque oceanográfico Ángeles Alvariño tras recorrer el mar de Alborán durante 24 días y explorar 13 zonas de estudio en las que se han obtenido cerca de 150 horas de imágenes submarinas de los hábitats profundos mediante sistemas de muestreo no invasivos como el ROV Liropus 2000 y el trineo fotogramétrico TASIFE.
Durante la expedición, denominada CIRCAESAL 0721, se han explorado cañones submarinos como el de La Línea de la Concepción o el de Guadiaro; montes submarinos como Djibouti, El Sabinar o el Seco de los Olivos; y la plataforma de la isla de Alborán, entre otras zonas.
Gracias al intenso trabajo conjunto de tripulación, técnicos y científicos, ha sido posible cubrir los objetivos de la expedición y obtener información de gran interés que servirá para ampliar el conocimiento de casi una veintena de hábitats de fondos rocosos y sedimentarios, como son las agregaciones de esponjas profundas, los bosques de gorgonias, los arrecifes de corales de aguas frías, los campos de Leptometra o los bancos de ostras gigantes, entre otros.
El equipo científico ha estado liderado por investigadores del Instituto Español de Oceanografía (lEO, CSIC) y ha contado con la colaboración de expertos de las universidades de Málaga, Cádiz, Granada y Murcia.
Los resultados de esta campaña permitirán caracterizar los hábitats, cartografiar aquellos de interés para la conservación y mejorar el conocimiento de los fondos marinos
La demarcación Estrecho-Alborán, como se denomina en el marco de la Directiva Marco sobre las Estrategias Marinas, es una región donde se produce la confluencia de masas de agua entre el mar Mediterráneo y el océano Atlántico, lo cual genera una alta biodiversidad y una amplia gama de tipos de recursos pesqueros. Presenta además un complejo relieve submarino, debido a la convergencia de las placas tectónicas de África y Eurasia y a las intensas corrientes del fondo marino, lo que genera una combinación de hábitats que es única en el contexto europeo.
Los resultados de esta campaña permitirán caracterizar los hábitats, cartografiar aquellos de interés para la conservación y mejorar el conocimiento de los fondos marinos, obteniendo información esencial para que las administraciones competentes establezcan medidas de protección y gestión sostenible.
«A falta de analizar toda la información en detalle, hemos encontrado algunos hábitats que son muy vulnerables y todavía presentes en un alto estado de degradación, especialmente en zonas cercanas al litoral, donde están más expuestos a los impactos antrópicos», explica Jose Luis Rueda. «Sin embargo, todavía quedan hábitats en un muy buen estado de conservación. Urge proteger estos hábitats que todavía persisten y mitigar el impacto, e incluso restaurar, los más degradados», apunta el científico.
Además del estudio mediante vídeo submarino, se han realizado muestreos extractivos clásicos con dragas y estudios acústicos con ecosondas, lo que posibilitará tener una información detallada de los diferentes componentes del fondo marino. «Esta información nos permitirá avanzar en el conocimiento de los procesos geológicos de los fondos marinos que determinan la morfología submarina y condicionan la presencia de los hábitats», explica Juan Tomás Vázquez investigador del Centro Oceanográfico de Málaga (IEO, CSIC) y responsable de la segunda parte de la campaña.
La campaña CIRCAESAL 0721 es la primera que se realiza en el mar de Alborán en el marco de la Directiva Marco sobre las Estrategias Marinas dentro del seguimiento de los hábitats de fondo, tanto en el ‘descriptor 1: biodiversidad’ como en el ‘descriptor 6: integridad del fondo marino’, dentro de la zona circalitoral y batial, incluyendo por tanto las aguas de la plataforma continental y las zonas más profundas de la cuenca.
El trabajo científico está liderado por el Instituto Español de Oceanografía (IEO, CSIC) en el marco del proyecto ESMARES-2, que surge del encargo del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico para la implementación de las Estrategias Marinas.