Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Equipo del Seprona en la Comandancia de Algeciras, han investigado a dos personas, en el marco de la operación ALTZAIRU, a las que se acusa de ser presuntas autoras de un delito contra los recursos naturales y el medioambiente en relación al traslado ilícito de residuos metálicos.
En el transcurso de la operación, los agentes han podido comprobar que los propietarios de una empresa venían realizando importaciones irregulares de residuos procedentes de países no comunitarios a través del puerto de Algeciras. Se trata de una empresa, asentada en San Roque, muy activa en este tipo de actividad pues desde 2018 había llegado a mover 44.000 toneladas de este tipo de residuos metálicos, una parte de ellos contaminantes, procedentes de Sudamérica.
Tras numerosas inspecciones realizadas en las instalaciones portuarias y el exhaustivo análisis de los documentos de acompañamiento de los residuos, se comprobaron irregularidades en la mayoría de las importaciones. Así, los residuos cuyo destino según la documentación que le acompañaba, debía ser las instalaciones de una empresa especializada para su correcto tratamiento situada en el País Vasco, quedaban en otras instalaciones del Campo de Gibraltar sin la debida autorización para su gestión. El destino final de todo el material era su venta a empresas dedicadas al metal.
De la investigación realizada se concluyó que la empresa era responsable de un delito contra los recursos naturales y el medioambiente quedando sus dos propietarios en situación de investigados.