Entre enero y abril de este año, en los puertos estatales que gestiona la Autoridad Portuaria de Almería – los de la capital y Carboneras -, se han embarcado y desembarcado casi 2 millones de toneladas de mercancías, volumen que representa un 37,7% más que en el mismo periodo de 2020. Por puertos, el de Almería ha movido 1,1 millones de toneladas (un 34,1% más), y el de Carboneras casi 780.000 toneladas (un 42,3% más). Por las dársenas de los puertos de la APA han pasado 358 buques, 110 menos que el año pasado, de los cuales 291 han atracado en las dársenas de la capital (126 menos), y 67 en las de Carboneras (16 más).
El mayor volumen de mercancía corresponde a los graneles sólidos, con 1,4 millones de toneladas, lo que representa un 44,2% más que en el primer cuatrimestre del ejercicio pasado. Este aumento se debe, principalmente, a la exportación de yeso, que ha crecido un 34%, al cemento (63,6% más), y al triturado de mármol y piedra caliza (158% más). También han crecido los tráficos de sal, perlita, turba y feldespato. Por el contrario, en este periodo ha disminuido el transporte de abonos naturales y escorias.
Los graneles líquidos han aumentado un 8,7%, con 38.700 toneladas, gracias a la exportación de biodiesel y sus mezclas desde el Puerto de Carboneras, que ha crecido un 23,6%, compensando el descenso del transporte de ácido fosfórico y de aceites y grasas industriales.
La mercancía general –transportada en contenedores, ro-ro y otros embalajes- ha superado las 477.000 toneladas, lo que supone un 22,7% más que el pasado ejercicio. Destacan los incrementos registrados por los materiales de construcción (un 38% más), los productos químicos (102% más), así como el tráfico de productos agroalimentarios. En cambio, en el primer cuatrimestre del año, han perdido peso los productos siderometalúrgicos, las maderas y el papel y pasta de papel, así como los aceites y grasas.
La Lonja del Puerto Pesquero de Almería, ha recibido hasta abril, 717 toneladas de producto fresco, volumen que supone un 20,5% menos que el año pasado. El volumen más importante de pescado descargado ha sido el de peces, con 604 toneladas, un 23,5% menos. La descarga de crustáceos ha sido de 55 toneladas, un 29,3% menos, mientras que la de moluscos, con 57 toneladas, es la única que ha crecido, con casi un 30% más.