El Puerto de Málaga ya dispone de una fecha concreta para el retorno del turismo de cruceros, que se hará de forma escalonada. Será el próximo 15 de junio, según ha solicitado la naviera alemana TUI.
La Delegación de Salud de la Junta de Andalucía analizará la solicitud para su aprobación, en base al protocolo sanitario aprobado hace unas semanas para el restablecimiento de itinerarios nacionales con escalas en la región, por lo que el recinto portuario podría convertirse en el primer puerto peninsular en recibir la escala de un buque de crucero en la era post Covid.
El presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio, considera que “se trata de una noticia verdaderamente importante, porque llevamos meses trabajando para la llegada de este momento con la aplicación de todas las medidas de seguridad”. Y subraya, además, que “a partir de ahora esperamos ir recuperando poco a poco el número de cruceristas que tuvimos en el pasado, que son una fuente de riqueza y empleo. Un turismo que en el futuro va a seguir creciendo y aportando a la economía malagueña”.
La naviera TUI desarrolla una experiencia de crucero “burbuja”, en la que traslada a sus pasajeros en sus propios aviones, y permite únicamente excursiones organizadas por la propia compañía, lo que garantiza que se respeten las medidas de seguridad anti COVID-19 en todo momento. Desde julio de 2020 opera en Canarias con itinerarios de cabotaje que están siendo un caso de éxito, por lo que la elección del Puerto de Málaga refuerza la apuesta de la compañía por el destino español y consolida la importancia del tráfico de cruceros en Andalucía.
De este modo, Málaga será puerto de escala del buque ‘Mein Schiff 2’, que partirá desde Gran Canaria a Palma de Mallorca.
SEGURIDAD EN EL PUERTO Y EL DESTINO. Como continuación al trabajo de coordinación desde la publicación del protocolo sanitario andaluz, la Autoridad Portuaria reúne hoy a todos los agentes implicados en esta escala, tanto del puerto como del destino. El objetivo primordial es garantizar la máxima seguridad en la operativa y las excursiones programadas, que estarán controladas mediante la distribución de los pasajeros en “grupos burbuja”.
Tomando como base el marco sanitario de actuación, que determina la forma en la que la tripulación y los cruceristas realizan las escalas, se afianzarán las medidas implementadas para garantizar, a su vez, la seguridad de los ciudadanos:
TRIPULACIÓN. La tripulación de los barcos deberá contar prueba PCR negativa de forma previa al embarque, además de realizar un periodo de aislamiento preventivo.
CRUCERISTAS. Los pasajeros deberán contar con una PCR negativa para poder embarcar. Una vez en el barco, se les ofrecerá una charla sobre las medidas de prevención y se les informará sobre los protocolos que deben cumplir a bordo.
Por otra parte, el aforo deberá reducirse al 60-70 por ciento de la capacidad total de los barcos, reservando de esta forma varios camarotes para la puesta en marcha de
aislamientos preventivos en caso de que fueran necesarios, bien por un contagio, bien por un contacto directo con un contagiado.
Además, el servicio de buffet estará inactivo. De esta forma, las comidas se servirán directamente en mesa.
Todos los cruceristas contarán con una póliza de seguro médico que garantiza la hospitalización en escala gracias al concierto con los hospitales de las ciudades en las que se realiza la escala, así como alojamiento incluido en caso de ser preciso realizar un aislamiento preventivo.
Además, los barcos contarán con laboratorios habilitados que permitirán realizar pruebas a los miembros de la tripulación, así como pruebas aleatorias a los propios cruceristas.
El Puerto de Málaga continuará trabajando en la reactivación del turismo de cruceros de forma segura, atendiendo siempre a las directrices de las autoridades sanitarias competentes sobre la evolución de la situación actual.