Continúan los procesos para reactivar el turismo de cruceros en la Ciudad Autónoma de Ceuta. El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy los protocolos sanitarios establecidos conjuntamente con la Autoridad Portuaria para los cruceros provenientes de otros puertos nacionales. Este es el primer paso para la reapertura de la ciudad autónoma al mercado de cruceros, que permitirá la escala de buques siguiendo todas las indicaciones para proteger a los pasajeros y a la ciudadanía ante la COVID-19.
El protocolo de actuación aprobado por Gobierno determina la forma en la que la tripulación y los cruceristas realizarán las escalas y establece los requisitos para garantizar la seguridad sanitaria dentro y fuera del barco. Las medidas únicamente serán válidas para buques provenientes del territorio nacional, ya que las restricciones impuestas por la Dirección General de la Marina Mercante que prohíben la entrada de los cruceros internacionales continuarán vigentes. Así, los buques de pasaje con itinerario exclusivamente nacional que inicien, finalicen o realicen escalas en el puerto de Ceuta deberán seguir los procedimientos de prevención y control estipulados por la Ciudad para minimizar el riesgo de transmisión del virus SARSCoV-2.
Según este nuevo marco, la tripulación tendrá que presentar tres pruebas PCR negativas antes del embarque y realizar un periodo de aislamiento preventivo
Según este nuevo marco, la tripulación tendrá que presentar tres pruebas PCR negativas antes del embarque y realizar un periodo de aislamiento preventivo. Los cruceristas, por su parte, deberán contar con una PCR negativa para poder embarcar y asistirán a una charla en el barco en la que se recordarán las medidas de prevención y los protocolos que deben seguir a bordo.
Además de lo anterior, los barcos contarán con laboratorios habilitados para llevar a cabo pruebas a los miembros de la tripulación y a los cruceristas quienes contarán con una póliza de seguro médico que garantice la hospitalización si esta fuera necesaria en cualquiera de las ciudades de la ruta.
Asimismo, el aforo se reducirá al 60-70 % de la capacidad total del barco, reservando camarotes ante la posibilidad de necesitarlo para el aislamiento preventivo de alguno de los pasajeros. Además, las comidas no se podrán organizar por buffet, sino que se servirán directamente en la mesa. Fuera del barco, se podrán realizar excursiones controladas en las ciudades en las que se haga escala, manteniendo la distribución y la formación de “grupos burbuja”.