La Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA) ha concluido el recalce del búnker del Rinconcillo, donde además el recrecido de la playa en esa zona gracias al trasvase de arena ya impide que las olas rompan contra el mismo.
Esta semana los trabajos se centran en el remozado, limpieza y pintado del búnker. Mientras tanto, Demoliciones Dayta sigue trabajando a buen ritmo. El director general de la Autoridad Portuaria, José Luis Hormaechea, ha insistido en las últimas horas en que la arena cuenta “lógicamente” tanto con ensayos de granulometría como analíticas de diferentes tipos, entre ellas químicas y orgánicas para garantizar que el material cumple con todas las prescripciones medioambientales que exige que los trabajos se lleven a cabo, en una zona catalogada como ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) e incluida en la Red Natura 2000.
El remozado búnker pertenece al sistema de fortificaciones creado en torno a la ciudad, al final de la Segunda Guerra Mundial, cuando Gibraltar perdió todo su papel estratégico en cuanto a una posible invasión. Poco a poco, todas las construcciones realizadas durante los años 40 fueron cayendo en el abandono y una gran parte de ellas fueron destruidas para permitir el crecimiento de las ciudades en las que se encontraban.
La mayoría de los fortines que aún hoy pueden encontrarse en la zona se encuentran en estado de total abandono si bien muchos de ellos han sido recuperados para uso público y reconstruidos. Ejemplos de recuperación de los búnkeres pueden encontrarse tanto en La Línea de la Concepción, donde el Ayuntamiento estableció la llamada Ruta de los búnkeres que permite visitar varias de estas estructuras, como en Algeciras, donde se están acondicionando varios búnkeres en el Parque del Centenario como centros de interpretación.
La tendencia actual en la política cultural es la recuperación de los fortines y nidos de ametralladoras como parte importante de la historia del Campo de Gibraltar, es por ello que estas construcciones se encuentran protegidas como Bien de interés cultural por la Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español y para ello la Junta de Andalucía posee un detallado catálogo de estas construcciones que le permite mantener un seguimiento de todas aquellas acciones realizadas sobre ellas.