La Asociación de Empresas Estibadoras y Centros Portuarios de Empleo (ANESCO) ha hecho público el resultado de un estudio elaborado junto a la Universidad Politécnica de Madrid, dirigido por el profesor Doctor Alberto Camarero, que cifra en 13.339.800 euros los costes extra que han tenido que asumir las terminales portuarias asociadas como consecuencia de la pandemia.
Los costes de pérdida de productividad en el periodo marzo-junio de 2020 ascienden a 5.230.000 euros
El informe cuantifica estos sobrecostes dividiéndolos en dos grupos: por un lado, los costes debidos a la pérdida de productividad de las terminales por las medidas sanitarias y de limpieza aplicadas en ellas para combatir los efectos del COVID-19 y, por otro lado, todos los costes directos efectuados por las empresas para hacer frente a la pandemia (mascarillas, geles para desinfección de manos y, sobre todo, los gastos incurridos en la limpieza de los equipos).
Así, los costes de pérdida de productividad en el periodo marzo-junio de 2020 ascienden a 5.230.000 euros aproximadamente, mientras los gastos originados por la compra de mascarillas, geles y limpieza de toda la maquinaria se calculan en unos 8.109.800 euros.
El estudio pone de manifiesto que las terminales portuarias de contenedores han respondido de forma eficiente y eficaz a las circunstancias derivadas de la pandemia generada por el COVID-19. Y ello, a pesar de todas las operaciones extraordinarias que han tenido que realizar para garantizar la seguridad de todos los trabajadores y cuyo efecto han sido pérdidas de tiempo de operación de unas 2 horas diarias para las terminales que trabajan 24 horas al día, esto es, casi el 10% del tiempo operativo.
Por último, ANESCO señala que todos estos sobrecostes han tenido que ser soportados por las propias terminales porque las ayudas articuladas a través de la reducción en las tasas de ocupación y actividad propuestas en el RDL 26/2020 no han afectado a las terminales analizadas por no cumplir con el requisito de reducción de volúmenes.