Un ascensor panorámico, sufragado mayoritariamente por la Autoridad Portuaria de Baleares (APB), salvará a partir de ahora el desnivel de 25,06 metros de altura en la costa de ses Voltes entre el Claustro del Carmen y el puerto de Mahón. La torre está dotada de una pasarela que comunica el desembarco superior con la ampliación de la plaza del mirador junto al Claustro y está protegida de posibles desprendimientos mediante una consolidación exhaustiva del acantilado.
El presidente de la APB, Francesc Antich, ha indicado que «nuestra intención es acercar los puertos a la ciudad e integrarlos en su entorno socioeconómico de la mano de la innovación y el respeto al medio ambiente».
Por su parte, el alcalde de Mahón, Héctor Pons, ha afirmado que el nuevo ascensor supondrá «una conexión directa entre el centro de la ciudad y el puerto de Mahón, que permitirá el tránsito de personas en ambos sentidos, reduciendo las barreras arquitectónicas».
En este sentido, el alcalde ha añadido que la nueva instalación se convertirá en «un elemento determinante en la ciudad, que funcionará como un dinamizador importantísimo de todo el puerto y de todo el entorno del Claustro del Carmen». El resultado de esta obra es «muy positivo, con una aceptación muy mayoritaria entre la ciudadanía mahonesa y entre el conjunto de visitantes que vienen a Mahón», concluyó Héctor Pons.
La inversión, adjudicada a la empresa Copcisa-Olives por un importe de 1.232.680,57 euros, se encuentra ya en funcionamiento.
Las obras se han ejecutado sin limitación de la circulación en Ses Voltes y de forma coordinada tanto con los servicios urbanísticos del Ayuntamiento de Mahón como con los negocios de restauración de la zona, haciendo uso de maquinaria pequeña para reducir las afectaciones, especialmente sobre el tráfico peatonal.
Además, se ha favorecido la integración paisajística del edificio dada su ubicación cerca del casco histórico de Mahón gracias al coloreado del hormigón y la estructura con los dos tonos naturales de la fachada marítima. Con esta intervención, la APB sigue con su estrategia de integrar los puertos en las ciudades y hacer partícipe a la ciudadanía de las diversas posibilidades de ocio que pueden acoger los puertos.