La terminal de contenedores proyectada para las aguas interiores de la ampliación norte del Puerto de València es un claro ejemplo de infraestructura que compatibiliza sostenibilidad y crecimiento. Por un lado, la nueva terminal va a ser la más avanzada medioambientalmente del mundo, y por otro lado, va a contribuir a generar empleo y riqueza en la Comunidad Valenciana y España. Esta infraestructura reforzará la posición de Valenciaport en el Mediterráneo y su labor de empresa tractor al servicio de la actividad económica española.
Así, en materia medioambiental la nueva terminal de contenedores será un espacio sin humos, ya que minimizará la emisión de CO2 mediante el suministro eléctrico a grúas y máquinas de patio, y a buques portacontenedores. En el proyecto presentado por TIL/MSC a Valenciaport se contempla la electrificación del 98% de los componentes motrices e instalaciones de la terminal; y además, la electricidad procederá en un 100% de fuentes renovables, lo que a su vez implicará una reducción del 98% en las emisiones de CO2.
En esta línea, la elevada automatización de los equipos y operaciones, el uso de sistemas avanzados de predicción de tráficos, el diseño de los edificios con criterios de eficiencia energética, y el sistema de iluminación externa con luminarias tipo LED permitirán minimizar el consumo energético. Un proyecto que se enmarca en el objetivo de «Valenciaport 2030, Cero Emisiones» que se sustenta en acciones que pasan por la apuesta decidida y firme por la implementación de energías renovables con inversiones en energía eólica y fotovoltaica, la construcción de una nueva subestación eléctrica que permita la conexión a la red de los barcos atracados en puerto, la implantación de proyectos con hidrógeno en instalaciones y maquinarias portuarias o los planes para el abastecimiento de GNL a buques.
Apuesta por la intermodalidad
En su proyecto, TIL hace una importante apuesta por la intermodalidad y ofrece desarrollar una terminal ferroviaria dotada de 6 vías de 1.000 metros de longitud, con capacidad para mover 305.000 TEUs/año por ferrocarril.
Además, la automatización de determinados procesos de la infraestructura supondrá la creación de un clúster tecnológico alrededor de ella con la consiguiente creación de empleo de alta cualificación.
La nueva instalación de contenedores creará nuevos empleos cualificados y será dinamizadora de la actividad económica de la Comunidad Valenciana y España. Y es que, la terminal va a suponer una inversión próxima a los 1.400 millones de euros: de hasta 400 públicos (con financiación pública que avalará y cubrirá el Puerto mediante su operativa diaria) y de 1.021 privados (comprometidos por TIL en su Plan de Inversiones). Todo ello va a generar un importante impacto económico tanto en la fase de construcción como cuando entre en funcionamiento.