La Autoridad Portuaria de Ceuta sigue realizando actuaciones de mejora y renovación de sus diferentes espacios. Una de ellas es la encaminada a la rehabilitación de los almacenes con los que el Puerto cuenta en el dique de Poniente. Esta actuación se ha adjudicado a una empresa especializada a través de una licitación pública iniciada con un presupuesto base de 279.015,91 € (sin impuestos).
El Puerto de Ceuta posee cinco naves ubicadas a lo largo de las distintas alineaciones del muelle de Poniente. Cuatro de ellas fueron construidas en la década de los 40, por lo que presentan signos de deterioro, debido al paso de tiempo y a la agresividad del ambiente marino.
Ya en 2009 se procedió a realizar una labor de renovación parcial de las instalaciones para acometer las grietas y fisuras que habían aparecido. No obstante, y debido a la agresividad del medio en el que se encuentran, se han reproducido los daños que entonces fueron subsanados.
Actualmente, se puede apreciar la aparición de nuevas grietas en estas naves que, en algunos casos, pueden ser observadas a simple vista, sobre todo en los recubrimientos de pilares. A esto hay que sumarle que existe un deterioro que provoca pérdidas de sección en armaduras y estribos, así como el desprendimiento de cascotes y revestimientos.
Por tanto, el proyecto de rehabilitación se plantea sobre cuatro naves rectangulares destinadas al almacenamiento. Las naves 1, 2 y 4 tienen una longitud de 77,20 m por 14,60 m de anchura, mientras que la 3 mantiene el mismo ancho, pero tiene una longitud de casi 100 m
Se han establecido una serie de acciones conjuntas a desarrollar en todas las edificaciones ejecutándose el saneado, limpieza y tratamiento de los diferentes elementos de hormigón que presenten desperfectos. También se trabajará en la eliminación del óxido de carpinterías exteriores. En esta línea, se aplicarán revestimientos anticorrosión, morteros de reparación, pintura sobre los revestimientos e imprimación y pintura sobre la cerrajería.
En principio, está previsto que los trabajos comiencen un mes después de la formalización del contrato, habiéndose adjudicado el contrato con un plazo de ejecución de cinco meses. El proceso se estructurará por fases de actuación para completar todas las tareas que el contrato conlleva. Una rehabilitación parcial que tendrá como resultado el aumento de la vida útil de las naves permitiéndoles continuar siendo un espacio de almacenamiento acorde a las necesidades del servicio que en ellas se presta.