Una de las grandes incertidumbres que se presenta en el nuevo año que acaba de comenzar es saber si las fronteras marroquíes con España reabrirán y, si lo hacen, cuándo.
Tanto las terrestres como las marítimas fueron cerradas con la irrupción del virus a mediados del mes de marzo y, desde entonces, aunque ha habido toda clase de rumores, siguen clausuradas sin que nada se sepa sobre las intenciones de sus gobernantes.
Marruecos culminó el 2020 con un balance de más de 432.000 personas afectadas por el coronavirus, con una media de contagio diaria que superaba el millar. Números, que sin ser los peores de esta etapa de crisis sanitaria, siguen preocupando y mucho a sus responsables políticos, que han ido prorrogando el estado de alarma mes a mes, además de endurecer las restricciones.
A primeros de diciembre, el rey Mohamed VI ordenó a su Gobierno que la vacuna contra la COVID-19 sea gratuita para todos los ciudadanos en la campaña que, se anunció, arrancaría en las siguientes semanas, aunque sin precisar su inicio.
Según un comunicado oficial, el objetivo de esta iniciativa “es proporcionar la vacuna a todos los marroquíes como medio adecuado de inmunización contra la enfermedad y controlar así su propagación para posibilitar que los ciudadanos vuelvan a su vida normal”.
Es lo que también se espera en esta orilla, que vuelva la vida normal para miles de familias que llevan sin ver a sus seres más queridos ante la imposibilidad de cruzar el Estrecho, salvo en los viajes pactados entre embajadas.
También es un deseo compartido por un importante número de empresas que han visto entorpecidos sus negocios con el país vecino, además de las compañías navieras y agencias de viaje, que van camino de cumplir el primer año sin poder vender ni siquiera un billete para sus pasajeros por culpa del coronavirus.
Cabe recordar que, tras 34 años de celebración ininterrumpida, la Operación Paso del Estrecho 2020 no pudo llevarse a cabo, con el estropicio económico que ha supuesto para los afectados, ya sean ciudadanos que no han podido desplazarse, empresarios y trabajadores, que esperan noticias halagüeñas en el recién estrenado año.