El Clúster Marítimo de Cantabria MarCA creará un Sello de Excelencia con el que pretende destacar el prestigio, la reputación y el valor que aporta la industria marítima al desarrollo económico de la región. Este nuevo reconocimiento se estructurará en torno a una serie de criterios económicos, técnicos y sociales que se definirán durante los próximos meses. La distinción aspira a convertirse en valor diferencial frente a la competencia y en un reclamo de confianza para clientes y proveedores. En palabras de Juan Luis Sánchez, presidente del Clúster MarCA: “es algo más que un sello de calidad. Supone adquirir un compromiso social y unos valores que queremos transmitir desde el sector marítimo”.
La creación de este Sello de Excelencia es una de las diez medidas prioritarias que incluye el Plan Estratégico 2021-2024 del Clúster MarCa presentado esta mañana.
Sánchez y Beatriz Sancristóbal, presidente y secretaria de la agrupación respectivamente, han detallado los contenidos más destacados de un documento que sitúa la economía azul sostenible en la centro de la estrategia de recuperación. “Tal y como sucede en Europa, pretendemos que en Cantabria también se declare nuestro sector como un elemento estratégico y un pilar fundamental para la reconstrucción económica de los próximos años” argumentó Sánchez.
El claim “LIGHT in the Storm, a reference in the growth” (“Luz en la tormenta, una referencia para el crecimiento” en inglés) vertebra la estructura de un documento que contempla seis áreas de actuación, cinco líneas de trabajo y diez ejes estratégicos. 70 páginas que sitúan la transición ecológica, la descarbonización, “que es el mayor reto del sector para los próximos diez años,” y la digitalización como las principales oportunidades de crecimiento. “Ante la certeza de que la innovación y la sostenibilidad marcarán el corto plazo de la economía azul, el Clúster Marítimo de Cantabria pretende abanderar ambas transiciones y explotar al máximo todas las posibilidades de negocio” continuó Sánchez.
El uso del hidrógeno como combustible alternativo, la explotación de las energías renovables marinas, la implementación de soluciones de Inteligencia Artificial o los gemelos digitales marcarán la evolución del sector a medio plazo. Además de favorecer el reconocimiento como una palanca de desarrollo para la economía regional, el Plan Estratégico 21-24 sentará las bases para engranar a toda la industria del sector marítimo y que sea capaz de tener estrategias armonizadas. “Si todos nos guiamos con la luz del mismo faro, llegaremos antes a nuestro destino” matizó Sánchez. “De hecho, después del COVID-19 van a aparecer nuevos modelos de negocio y nueva áreas de oportunidad que debemos aprovechar”.
ADAPTACIÓN, COMPROMISO Y UNIDAD. Además de presentar el Plan, los portavoces del Clúster Marítimo de Cantabria también hicieron balance del ejercicio actual. “A pesar de todas las circunstancias, nuestro número de socios se ha incrementado un 12 %” manifestó Beatriz Sanscristóbal. En su repaso a lo más destacado del año, la secretaria del Clúster explicó que la economía azul de Cantabria inició 2020 con unos datos de crecimiento muy esperanzadores. El primer Informe del Sector Marítimo en la región reflejaba una apuesta decidida por la tecnología y la innovación traducida en una inversión anual de 8,25 millones de euros en I+D+i, más del 20% del total regional en investigación. Un trabajo que alineaba a las empresas cántabras con la tendencia de un sector que en España crecía a un ritmo tres veces superior al resto de la economía.
La pandemia provocada por el coronavirus supuso un inesperado golpe que lastró notablemente el despegue que la industria marítima había iniciado en 2019. Desde el Clúster Marítimo de Cantabria se promovió la filosofía de continuar hacia adelante unidos, con responsabilidad y compromiso. “Hemos sido capaces de adaptarnos y las empresas están en proceso de buscar nuevas oportunidades de negocio en este entorno tan cambiante” indicó Sancristóbal.
La posición aventajada de la industria marítima, unida a una apuesta decidida por la innovación y la colaboración como ejes para la recuperación económica, ha permitido al sector amortiguar mejor el impacto de la crisis. “La resiliencia mostrada por el sector marítimo de Cantabria no solo nos permitirá recuperarnos con más agilidad, sino que potenciará nuestro rol como uno de los agentes de referencia para la economía de Cantabria” indicó Sánchez.
A pesar de los evidentes impedimentos, el Clúster Marítimo de Cantabria ha aprovechado 2020 para nutrir sus relaciones con otros actores estratégicos dentro del sector. La participación del clúster en la feria internacional virtual MariMatch 2020, la exitosa organización de seminarios virtuales sobre el hidrógeno y el Deep learning o la entrega del II Premio Industria Azul Cantabria a Christophe Mathieu han contribuido a consolidar la madurez del Clúster como organización sectorial.