El jurado de los Premios Salvamento Marítimo 2020, en su categoría a la Mejor Contribución al ODS 14 de Naciones Unidas, ha reconocido el «compromiso y esfuerzo» de la Autoridad Portuaria de Las Palmas (APLP) reflejado en la «conservación y limpieza» de los mares, así como en la minimización del impacto ambiental de la organización.
Así lo expone el jurado que, además, resalta la «difusión a nivel interno de su compromiso con el medio ambiente», según informó la APLP en nota de prensa, ya que el Puerto de Las Palmas está considerado como un «refugio histórico» para los tránsitos entre Europa, África y América.
Añaden que se trata de un referente del Atlántico Medio, tanto por su situación geográfica como por su «potente carta» de servicios y su profesionalidad acreditada en reparaciones navales, offshore, bunkering, avituallamiento, logística o cambio de tripulaciones, entre otros.
En este contexto de actividad industrial constante recuerdan que el Puerto de Las Palmas también fue pionero en España en lucha contra la contaminación, ya que en el año 2004 la Autoridad Portuaria firmó con varias petroleras el primer convenio nacional para combatir los vertidos accidentales.
Este convenio permitió instalar las primeras barreras anticontaminación de España para operativas de suministro de combustible.
En cuanto al plan de lucha contra la contaminación de la APLP, indican que el objetivo central «es conservar el medio marino y la calidad de las aguas portuarias», de tal forma que para alcanzarlo actúa sobre cuatro ejes, tales como son la lucha continua contra cualquier contingencia 365 días al año, 24 horas al día; recoger sólidos flotantes y microplásticos en todas las dársenas mediante embarcaciones especializadas, así como líquidos oleosos. También existe un dispositivo específico para embarcaciones menores que incluye dos puntos limpios en el Muelle Deportivo y cuatro puntos SEABIN en esa dársena.
Asimismo, tiene como eje la recogida periódica de muestras para controlar la biodiversidad marina poniendo especial atención en las especies invasoras mediante la vigilancia en aguas de lastre y las adherencias en los cascos; aplicación de la ROM 5.13 sobre control del potencial ecológico de las aguas portuarias; y vigilancia activa para prevenir episodios de contaminación de cualquier índole. Además del desarrollo de proyectos con otras autoridades portuarias y organismos internacionales como Atlantic Blue Port e Impressive.
El presidente de la APLP, Luis Ibarra, ha querido reconocer a los trabajadores de la Autoridad Portuaria, así como de las empresas que prestan estos servicios, por desarrollar un «trabajo constante, duro y tenaz» que contrapesa el impacto que la actividad portuaria tiene sobre el medio.
Por último, Ibarra concluyó que la política de la APLP «se alinea con el Objetivo de Desarrollo Sostenible, ODS14, de la ONU, y el reto inmediato como puerto y motor económico de Canarias es mantener la actividad con acciones que garanticen el equilibrio del medio marino y de todo el entorno portuario».