El Puerto de Barcelona ha reducido sus emisiones de dióxido de carbono (CO2) un 20%, convirtiéndose así en el primer puerto del mundo en conseguir la estrella Lean & Green, plan impulsado por la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc), al lograr esta reducción en un plazo máximo de cinco años.
El enclave se unió al plan de acción de la iniciativa Lean & Green en 2016 marcándose como objetivo reducir las emisiones de CO2 hasta este mismo año utilizando como medidor propio las toneladas de mercancía transportados anualmente, ha informado el enclave portuario en un comunicado este martes.
El Puerto de Barcelona ha realizado varias acciones para reducir sus emisiones enmarcado en el plan de acción con la Aecoc: la renovación de la flota propia con vehículos 100% eléctricos, la modernización del alumbrado público con tecnología LED y el uso de energía 100% de fuentes renovables.
La consultora Ernst & Young ha sido quien ha certificado que el enclave ha conseguido la meta en el periodo establecido utilizando como indicador la huella de carbono y la consecución del plan; el puerto ya recibió el premio Lean & Green por su plan de acción para reducir emisiones de CO2 de la zona el pasado mes de julio.
Lean & Green es la mayor plataforma europea concienciada en la reducción de las emisiones de efecto invernadero asociadas a los procesos logísticos cumpliendo así con los objetivos impuestos en la Convención del Clima en París (COP21) de emisiones neutras de carbono para el año 2050 y está presente en 14 países y firmado por 600 empresas.
NUEVOS PROYECTOS. La presidenta del Puerto de Barcelona, Mercè Conesa, ha destacado que la distinción demuestra que están «plenamente comprometidos» con los objetivos de los Acuerdos de París para la reducción de emisiones que se enmarcan en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas.
Conesa ha afirmado que uno de los proyectos que se iniciará para seguir con la reducción de emisiones en el puerto es el ‘Power to Ship’, que permitirá la conexión eléctrica de los barcos en el muelle, eliminando las emisiones de los motores auxiliares, además de apostar por la movilidad eléctrica y la promoción del gas natural licuado como combustible alternativo.