El tráfico de mercancías en el puerto de Castellón crece un 0´9% durante el mes de agosto y contabiliza un total de 1.885.692 toneladas. La mejora de los graneles líquidos sostienen estos números y rompe la tendencia de los meses anteriores. En concreto, ese sector crece un 16,7%, y suma 991.117 toneladas.
El efecto de la pandemia condiciona aún el resto de tráficos, que registran descensos este mes de agosto respecto al mismo periodo del año anterior: un 6,2% en graneles sólidos y un 32,9% en mercancía general.
Con estas cifras, el enclave castellonense acumula 12.413.603 toneladas en lo que va de año, lo que supone un 9,6% menos respecto al año anterior, fruto de la crisis provocada por la COVID-19. No obstante, este descenso está lejos de los contabilizados en meses anteriores.
El presidente de la Autoridad Portuaria de Castellón, Rafa Simó, ha apuntado que los datos registrados en agosto rompen la tendencia de los últimos meses, aunque se ha mostrado cauto respecto a la evolución hasta final de año. «Se trata, sin duda, de un buen dato y confiamos en que sea el punto de inflexión en la recuperación de la actividad económica», ha indicado Rafa Simó.
Además, estos registros constatan la diversificación del Puerto de Castellón: el 55,1% de las mercancías movidas son graneles líquidos, seguidas de graneles sólidos, que suponen un 34,2%, y la mercancía general, un 10,7%.
Las mercancías más importantes movidas en los muelles del recinto portuario en agosto son, por este orden, el petróleo, feldespato, arcillas, azulejos y baldosas y biodiesel.
Los principales puertos con los que Castellón mantiene relaciones comerciales son Turquía, Nigeria, Rusia, Ucrania, Italia, Brasil y Argelia.
