Un total de once cetáceos han aparecido varados en Fuerteventura en lo que va de año, según datos de la Consejería de Medio Ambiente del Cabildo.
En concreto, han sido tres calderones grises (Grampus griseus), un cachalote (Physeter macrocephalus), un rorcual común (Balaenoptera physalus), un delfín común (Delphinus delphis), tres delfines listados (Stenella coeruleoalba) y dos delfines moteados (Stenella frontalis), varando la mayoría de ellos en la zona norte de la Isla.
Canarias presenta unas características oceanográficas y geomorfológicas singulares que permiten albergar una gran diversidad de cetáceos, tanto residentes como de paso. El archipiélago constituye el lugar de toda Europa con mayor biodiversidad en este grupo de especies.
En la actualidad, según el Banco de Datos de Biodiversidad de Canarias (BIOTA), existe un total de 32 especies de mamíferos marinos en Canarias. Entre las especies más comunes que componen esta rica biodiversidad destacan delfines, calderones, zifios, ballenas, rorcuales y orcas.
Finalmente, a lo largo de 2019, se produjeron en Fuerteventura 32 varamientos de cetáceos pertenecientes a nueve especies diferentes. Prácticamente, en la totalidad de los varamientos el animal se encontraba sin vida, a excepción de un delfín listado hallado en Costa Calma que pudo ser devuelto al mar, gracias al protocolo de actuación de cetáceos varados.