Funcionarios de la Unidad de la Policía Adscrita a la Comunidad Autónoma de Andalucía y Agentes de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía han realizado un dispositivo especial con el objeto de controlar las acampadas ilegales que se vienen detectando en áreas del Parque Natural del Estrecho en el término municipal de Tarifa. Esta operación se ha llevado a cabo esta semana junto con efectivos de la Benemérita y de la Policía Local tarifeña.
A las cinco de la madrugada del miércoles se inició el operativo comprobando las matrículas de aquellos vehículos que permanecían estacionados en zonas protegidas de Los Lances, Bolonia y Valdevaqueros. Posteriormente, se procedió a identificar a las personas que se encontraban en su interior levantándose un total de 139 actas de denuncia por acampar de manera ilícita. 300 personas fueron desalojadas por pernoctar en lugares del Parque Natural del Estrecho no habilitados para ello.
Esta actuación forma parte de la campaña especial de control implementada, este verano, contra este tipo de actos que dañan el Parque Natural del Estrecho
Esta actuación forma parte de la campaña especial de control implementada este verano –que continúa con intervenciones policiales periódicas– y de la lucha que durante todo el año mantienen la Junta de Andalucía, el Ayuntamiento de Tarifa y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado contra este tipo de actos que dañan el Parque Natural del Estrecho. Según su normativa, está prohibido el estacionamiento durante la noche excepto en los lugares explícitamente autorizados: “No se permite el estacionamiento desde el ocaso hasta la salida del sol de cualquier tipo de vehículo, salvo dentro de los campamentos de turismo. Las caravanas, autocaravanas y vehículos similares homologados por la normativa sectorial podrán hacerlo, además, en aquellas zonas que a tal efecto se habiliten”.
En Andalucía la pernocta de autocaravanas está regulada, permitiéndose solamente en las denominadas Áreas de Pernocta, donde se dota de espacios en los que las personas que practiquen esta actividad de vida al aire libre dispongan de los servicios, instalaciones y equipamientos adecuados para atender las necesidades de mantenimiento, suministros y otros servicios que estos vehículos alojamiento precisen y que resulten acordes y respetuosos con el entorno.
Está expresamente prohibido el aparcamiento y pernocta fuera de estos espacios habilitados, precisamente por el posible daño al entorno, por los residuos generados y el riesgo en verano al ser época de alto riesgo de incendios forestales, sobre todo en un Parque Natural.
Desde la Unidad de Policía Adscrita a la Comunidad Autónoma de Andalucía se ha explicado que la actuación policial realizada persigue la erradicación de esta práctica ilícita, además de concienciar a los denunciados de los graves perjuicios que con dicha actividad pueden ocasionar en el medio ambiente, y en especial, el peligro que supone un incendio en unos parajes de tan alto valor ecológico.
Parque Natural del Estrecho
El Parque Natural del Estrecho es un espacio natural marítimo-terrestre, situado entre el Atlántico y el Mediterráneo, que goza de especial protección y que alberga una gran riqueza marina y terrestre de notable singularidad. Se han contabilizado más de 1.900 especies de flora y fauna marina, siendo las más frecuentes e importantes la tortuga boba, el delfín o la marsopa.
Igualmente, cuenta con bellas playas como la de Los Lances, amparada bajo la figura de protección de Paraje Natural Playa de Los Lances, o la de Bolonia, cuya famosa duna ha sido declarada Monumento Natural Duna de Bolonia. En estos arenales costeros crecen plantas adaptadas a la sequedad y el viento como el barrón, el enebro y la típica camarina, que da nombre al faro de la zona. Alrededor existen pinos piñoneros, procedentes de la repoblación practicada en los años 60 del siglo pasado para contener las dunas, junto con un matorral de alto valor ecológico.
Adentrándose en la sierra aparecen encinas, alcornoques y acebuches junto con eucaliptos de repoblación. En los acantilados destacan los hinojos marinos y por doquier narcisos y genistas. Otro atractivo del parque son las aves, las de mayor presencia son la cigüeña blanca, el halcón abejero, el milano negro y el buitre leonado. También es posible avistar águilas imperiales, elanios azules, alimoches, águilas perdiceras e incluso halcones peregrinos. Esta riqueza ornitológica se multiplica con el paso de las aves migratorias, un espectáculo del que se puede disfrutar en la red de observatorios del parque en distintas épocas del año.
El patrimonio cultural es otro reclamo más; de los numerosos restos arqueológicos, sobresale la antigua ciudad romana de Baelo Claudia, enclave estratégico para la industria salazonera de la Bética. Un legado arqueológico que no se limita a la superficie terrestre, ya que el patrimonio submarino también ocupa un importante lugar en el Parque Natural del Estrecho, resultando llamativa la cantidad de restos de naufragios.