Los cinco directivos de la Autoridad Portuaria de Baleares (APB), detenidos en una investigación por presunta corrupción, incluido su presidente, Joan Gual de Torrella, han quedado en libertad con cargos, tras los registros, llevados a cabo durante horas, en las sedes de Palma, Ibiza y Mahón.
Ademas de Gual de Torrella, han quedado en libertad el vicepresidente de la APB, Miguel Puigserver (presidente de la Asociación Patronal de Empresarios de Actividades Marítimas de las Islas Baleares, APEAM); el director, Juan Carlos Plaza; el jefe del Área de Explotación y Servicios Portuarios, Fernando Berenguer; y el jefe de departamento de Explotación Portuaria, Armando Parada, según confirmaron fuentes de la investigación a EFE. Todos ellos fueron detenidos en una investigación, declarada secreta, del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma y de la Fiscalía Anticorrupción.
Agentes de Policía Judicial de la Guardia Civil acudieron a practicar registros a las oficinas de las tres sedes de la APB en las islas. En el caso de Palma, el registro comenzó el jueves a última hora, mientras que en la sede de la APB en Mahón, el registro de las oficinas comenzó sobre las 7,20 horas y se prolongó hasta las 13.15 horas; en Ibiza también duró varias horas e incluyó la sede del Club Náutico Ibiza (CNI), que se puso a disposición de la secretaria judicial para facilitar la documentación que precisara.
En el caso de Palma, algunos de los detenidos fueron trasladados desde la Comandancia de la Guardia Civil a la sede de la APB por la mañana para estar presentes en los registros, que se prolongaron hasta la noche.