El juez de la Audiencia Nacional, Alejandro Abascal, ha dictado prisión incondicional para Pedro Maza, armador del pesquero ‘Rúa Mar’ y otras dos personas que fueron detenidas en la operación «Matraca». Asimismo, el magistrado ha dictado órdenes de busca y captura internacional para otros miembros de la organización que se encuentran fugados.
La decisión ha sido acordada después de que los tres detenidos en la actuación policial – entre ellos, la mujer de Maza – hayan comparecido por videoconferencia desde Algeciras ante el titular del juzgado central nº 6 de la audiencia Nacional, instructor de la causa que se sigue, por supuestos delitos de organización criminal, blanqueo de capitales y tráfico de hachís.
En el caso del armador también se investiga su posible responsabilidad penal en la muerte de los seis marineros que iban a bordo del Rúa Mar, el pasado 23 de enero cuando naufragó, frente a las costas de Cabo Espartel.
Fue entonces cuando se conoció que el magistrado ya investigaba a esta embarcación como parte de una supuesta trama para introducir hachís desde Marruecos utilizando para ello barcos pesqueros.
La investigación, que se encuentra bajo secreto de sumario, se reactivó el martes pasado con una operación policial en la que participaron 200 agentes y que ahora, la Policía Nacional ha dado por concluida al quedar desarticulada la mayor organización criminal activa dedicada al tráfico de hachís en el Campo de Gibraltar, presuntamente dirigida por el clan de ‘Los Pantoja’. Esta organización operaba en Algeciras, La Línea y Tarifa y disponía de una flota de pesqueros con caletas, perfectamente diseñadas, en cuyo interior cargaban importantes cantidades de estupefaciente.
En este sentido, ha recordado que su líder fue detenido recientemente por la Policía para evitar su fuga, así como que la explotación operativa de la investigación ha culminado con la detención de cinco personas, entre ellas el patrón del Rúa Mar. Además, se han realizado seis registros y se han intervenido cuatro embarcaciones de pesca, 12 vehículos y documentación.
El modus operandi de la organización era el siguiente: con la excusa de salir a pescar, una tripulación connivente, supuestamente, cargaba el hachís en alta mar, para posteriormente introducirlo en España. Una vez en el puerto pesquero, su ilícita carga era descargada por la organización haciendo uso de importantes medidas de seguridad en toda la zona.
Una de estas operaciones de narcotráfico fue abortada por los investigadores en octubre del pasado año. Entonces se interceptó una
embarcación que transportaba 1.181 kilos de hachís a su llegada al Puerto de Algeciras y se detuvo a toda la tripulación, compuesta por seis personas.
Las investigaciones realizadas indicaban que, en enero de 2020, la organización habría enviado una nueva tripulación a bordo del pesquero Rúa Mar para, presuntamente, cargar en alta mar unos 2.000 kilogramos de hachís. El peso de la ilícita carga, unido al mal estado de la mar y del buque, hicieron que este se hundiera al oeste del cabo Espartel, falleciendo todos sus tripulantes.
Durante los meses posteriores, la crisis sanitaria ocasionada por el covid-19, ha servido para centrar las actuaciones en avanzar en la investigación. Fruto de ello, se pudo localizar y detener, el día 24 de junio, al líder de esta organización, conocido como ‘El Pantoja’.