La compañía Cepsa ha conmemorado el Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, que cada 28 de abril coordina la Organización Internacional del Trabajo, bajo el lema Detengamos la pandemia: la seguridad y salud en el trabajo puede salvar vidas.
El objetivo ha sido, sensibilizar sobre la adopción de prácticas seguras en los lugares de trabajo, haciendo hincapié para que se adopten las medidas de cara a garantizar que todas las personas desempeñen su labor en un ambiente sano y seguro. Y lo hace en medio del Estado de Alarma provocado por la crisis sanitaria, una situación que ha llevado a la Compañía, cuya actividad es esencial, a incorporar medidas que favorezcan el distanciamiento social y extremen la higiene en sus centros operativos, puntos de venta y distribución.
La prevención forma parte innata de la cultura de trabajo que engloba a todos los profesionales de Cepsa y se trabaja día a día para inculcar también esta visión en las empresas auxiliares
La prevención forma parte innata de la cultura de trabajo que engloba a todos los profesionales de Cepsa y se trabaja día a día para inculcar también esta visión en las empresas auxiliares, proveedores, distribuidores, clientes y poblaciones vecinas.
Cepsa en Andalucía cuenta con dos centros industriales de alto perfil tecnológico en Palos de la Frontera (Huelva) y San Roque (Cádiz) donde se ubican las refinerías, plantas químicas y factorías, cuya política de prevención es la prioridad absoluta, no solo en Andalucía sino a nivel global. Teniendo en cuenta la actual crisis sanitaria, Cepsa ha implantado el trabajo en remoto a gran escala, incrementado la jornada del turno para reducir el número de relevos en planta y cerrado las zonas comunes para evitar contagios. Además, ha aumentado el número y la intensidad de todas las medidas higiénicas y sanitarias, e instalado cámaras termográficas en los accesos a los centros industriales para medir la temperatura de todo el que acceda.
El objetivo prioritario es cero accidentes. El año pasado la empresa certificadora de sistemas de gestión de prevención de riesgos laborales AUDELCO reconoció la excelencia preventiva de la Planta Química de Palos, sumándose al reconocimiento con el que la Federación Empresarial de la Industria Química Española (FEIQUE) galardonó en 2018 a las plantas químicas de Palos y San Roque con su Premio Especial de Seguridad. Buscando siempre el juicio de terceras partes para mejorar continuamente, las plantas de Cepsa tienen establecido un Sistema de Gestión de Seguridad y Salud certificable de acuerdo con la norma OHSAS 18001. En el año 2020, estas certificaciones se actualizarán acordes a la nueva norma ISO 45001.
Cepsa tiene implantado un Sistema de Gestión de Seguridad de Procesos con el objetivo de tener un marco común que permita ejercer un mayor control sobre los procesos productivos en todo momento, de acuerdo a las directrices del Energy Institute (EI).
La seguridad para Cepsa se extiende también a sus productos y por eso el área de Tutela de Productos evalúa todo su ciclo de vida desde su desarrollo hasta la comercialización. Gracias a este enfoque de seguridad integral, la actividad se lleva a cabo bajo un estándar de excelencia que engloba la protección ambiental, la conservación de los recursos naturales y la eficiencia energética.
La Compañía lleva también a cabo una evaluación de los riesgos y determina las distintas opciones para reducir los mismos. Esta evaluación se realiza identificando los riesgos específicos de cada área y puesto de trabajo; así como, el factor humano. Cepsa elabora cada año un Plan de Observaciones Preventivas de Trabajos para corregir acciones y conductas inseguras. En 2019, se realizaron 42.392 Observaciones Preventivas de Seguridad (OPS) en toda la Compañía. Desarrolla también anualmente un Plan de Inspecciones Técnicas, la programación de las paradas de producción de mantenimiento y el Plan de Caminatas de Seguridad, que consisten en recorridos que realiza la línea de mando con los operadores en busca de mejores prácticas.
Hay que sumar que Cepsa tiene su Plan de Emergencia Interior (PEI), en el que están recogidos los protocolos de actuación en caso de emergencia y cómo se realizaría la evacuación del personal si fuera necesario, además de la coordinación con los servicios de emergencia exterior. Para que los planes funcionen, la formación es clave. Por eso, se realizaron el año pasado 175 simulacros en Andalucía, 1.531 a nivel global, y se impartieron 41.371 horas de cursos en función de las competencias necesarias en materia de seguridad para los riesgos específicos en los puestos sean industriales o no.