Según recogen medios locales, el capitán del buque Spirit of Hamburg, de 50 años e identificado como Myo Tun Zaw, de nacionalidad birmana, fue asesinado por miembros de su triuplación cuando se encontraban en Cartagena de Indias, en Colombia.
El comandante de la Policía Metropolitana de esta localidad, el general Henry Sanabria, confirmó el presunto homicidio, que se produjo durante la tarde de este pasado jueves. “Las primeras indicaciones por parte de la Policía Nacional y el cuerpo técnico de investigaciones en el sitio permiten establecer que, al parecer, esa persona fue objeto de un ataque por parte de la tripulación. El cuerpo técnico está al frente de obtener más detalles sobre los móviles”, señaló el oficial.
“Atacaron al capitán del barco en medio de una riña, no sabemos quién fue el autor porque habían 12 filipinos, pero ninguno dio información. Ellos hablaban en su idioma natal y en inglés, pero ninguno dio detalles que fueran acertados”, añadió.
Como recoge en sus acuerdos la Convención sobre el Derecho de Mar de 1982, los presuntos culpables no serán juzgados en Colombia, sino en el país bajo el que navega el barco.
“Bajo este principio de extraterritorialidad, este delito no fue cometido en jurisdicción de Colombia y, por lo tanto, no puede asociarse este caso a una política criminal nacional, sino del país de origen”, precisó la Policía Metropolitana de Cartagena a través de un comunicado.
Así las cosas, el buque mercante ‘Spirit of Hamburg’ y su tripulación, todos de origen asiático, permanecen en un puerto de la ciudad, a la espera de que la Fiscalía General de la Nación autorice a la Capitanía de Puerto su salida de aguas colombianas.