El servicio marítimo de la Guardia Civil ha tenido que proveer de alimentos a dos jóvenes extranjeros que permanecen en un velero fondeado en la Isla de Lobos, un pequeño islote situado en el noroeste de la costa de Fuerteventura, y que se quedaron sin agua tras diez días sin poder entrar en el Puerto de Corralejo al necesitar una autorización previa por el estado de alarma.
Ante esta situación, las dos personas solicitaron ayuda urgente al 062, ya que el velero no pudo entrar al Puerto de Corralejo, al necesitar una autorización previa para hacerlo, un trámite que los dos auxiliados desconocían cómo llevar a cabo.
Así, la urgencia del caso hizo que el Servicio Marítimo de la Guardia Civil les haya atendido y haya hecho la compra por ellos para llevársela posteriormente a la embarcación.