Un buque de carga con 190 migrantes y refugiados quedó varado a primera hora del lunes en la isla griega de Cea, en las Cícladas, muy lejos de los puntos a los que suelen llegar embarcaciones con refugiados procedentes de Turquía.
El barco había salido del puerto turco de Çanakkale, cerca de la frontera terrestre grecoturca, donde desde finales de febrero miles de personas han acudido con la intención de entrar a Europa, después de que Ankara anunciara la apertura de sus fronteras.
El destino final de la embarcación no era Grecia, sino Italia, pero las malas condiciones climáticas forzaron su llegada a Cea.
Según la Guardia Costera, en esa zona marítima las condiciones son extremadamente adversas, con vientos de fuerza ocho en la escala de Beaufort.
Los ocupantes del barco (123 hombres, 29 mujeres -dos de ellas embarazadas- y 38 menores) se encuentran bien y han sido trasladados a un antiguo hotel de la isla, según confirmó la Guardia Costera helena en un comunicado. Entre los pasajeros fueron encontrados tres traficantes.
Se espera que 10 miembros de las autoridades portuarias lleguen hoy a la isla en helicóptero para investigar si el buque ha generado contaminación en la zona. EFE