La salida de Reino Unido y por ende de Gibraltar de la Unión Europea, desde que el pasado viernes se hiciese efectivo el Brexit, comenzando el periodo transitorio que nos llevará hasta el 31 de diciembre, ha hecho avanzar diferentes proyectos de línea marítima entre Gibraltar y España, así como la conexión marítima existente con Marruecos y la frontera terrestres, ya que se trata de proyectos interrelacionados, debido a que dependiendo de la fluidez de la frontera, los elementos de transporte marítimo serán más o menos pujantes.
Hay empresas que vienen desde hace meses, trabajando de forma conjunta con las Administraciones, española y gibraltareña, al objeto de implantar un servicio marítimo de mercancías entre Gibraltar y el puerto de Algeciras
El Peñón es una economía de servicios con alta renta per cápita que necesita garantizar que sus necesidades están cubiertas, de forma óptima, ya sea por la frontera terrestre o por vías, aérea o marítima. Esto ha provocado la existencia de múltiples proyectos o planes de contingencia que tienen elementos prioritarios como son los productos perecederos o residuos entre otros, cuya logística debe estar planificada en todo momento, desde el primer minuto del Brexit.
Ante esta situación, hay empresas que vienen desde hace meses, trabajando de forma conjunta con las Administraciones, española y gibraltareña, al objeto de implantar un servicio marítimo de mercancías entre Gibraltar y el puerto de Algeciras. De hecho, han sido varias las pruebas realizadas para poder acoplar la rampa de embarque en uno de los buques que se maneja como posible enlace entre ambos puertos, con resultados positivos.
En múltiples aspectos se ha analizado esta situación tanto desde el punto de vista privado como institucional, resultando poliédrico e impredecible, y únicamente a partir de la conclusión del periodo de transición, el día 31 de diciembre de 2020, se sabrá si la adaptación a los protocolos y normas van a conducir hacia el mantenimiento de una buenas relaciones con posterioridad a esta fecha.
Desde Gibraltar se ha establecido como máxima prioridad el interés por las personas. Así, trabajadores, empresarios, vehículos y ciudadanos en general, esperan que se pueda circular por la futura frontera terrestre como hasta ahora, con la misma fluidez, beneficiándose ambas partes por el flujo de trabajadores, y también por los ingresos que se integran en la economía del Campo de Gibraltar.