El consejero de Innovación, Industria, Transportes y Comercio, Francisco Martín, y el presidente de la Autoridad Portuaria de Santander (APS), Jaime González, han informado este lunes de que la Unión Europea confianciará con seis millones de euros, el 20% del total, la terminal para el suministro de GNL (Gas Natural Licuado) del Puerto de Santander, cuya inversión asciende a 32,8 millones.
Según ha destacado el Gobierno en un comunicado, este hecho convertirá a la infraestructura en un «puerto estratégico» del norte de España. El depósito, con una capacidad de 1.000 metros cúbicos, será construido por el consorcio creado por Repsol LNG Holding, el Puerto de Santander y ESK. González ha explicado que el proyecto, con una duración de unos tres años y medio, consistirá en la construcción de una terminal de suministro de búnker de GNL en el Puerto de Santander, así como de las infraestructuras portuarias necesarias que habiliten el espacio requerido y el desarrollo e implantación de una cadena de suministro para abastecer el terminal y cubrir la demanda del búnker. Además, se llevará a cabo un análisis del mercado para cubrir un posible incremento de la demanda, así como contribuir a nivel europeo a la seguridad de este tipo de suministro.
Según ha informado el presidente de la APS, el proyecto se llevará a cabo con la colaboración de ESK como empresa de transporte que se encargará del suministro del GNL con camiones cisterna desde la terminal de regasificación más cercana. Por su parte, el Puerto de Santander deberá adaptar el punto de atraque con una rampa roro, de forma que tanto los buques de Brittany Ferries como los de otros tráficos compatibilicen sus operaciones con el suministro de combustible. La inversión en infraestructuras portuarias supone aproximadamente un 50% del total, mientras que el otro 50% va destinado a la instalación de abastecimiento de GNL propiamente dicha.
El Gobierno ha señalado que con esta iniciativa se pretende implantar y mejorar las infraestructuras de abastecimiento de búnker de GNL en el norte de España mediante un proyecto que adaptará al puerto cántabro a las nuevas tecnologías de sistemas de propulsión y almacenamiento y satisfacer así la demanda de este tipo de suministro para barcos y buques en un puerto estratégico del Cantábrico, especialmente para las embarcaciones de la compañía Brittany Ferries. Los barcos que realizan rutas marítimas fijas, como ferris, cruceros o portacontenedores, son los primeros en los que se está implantando el GNL. Su regularidad facilita el desarrollo de infraestructuras y los contratos a medio plazo que justifican la inversión minimizando el riesgo, apunta el Gobierno.
El GNL es una alternativa cada vez más valorada por los armadores para su uso en el transporte marítimo, ya que reduce las emisiones y cumple con la IMO 2020, la normativa de la Organización Marítima Internacional, que entrará en vigor el 1 de enero de 2020, y por la que se limitará el contenido de azufre en los combustibles para el transporte marítimo, pasando del 3,5 al 0,5 por ciento.
Martín considera que esta importante inversión abre nuevas posibilidades al Puerto de Santander con vistas al futuro al adaptarse a un combustible con menos emisiones y que mejora el medio ambiente, la seguridad y también el ahorro económico. El consejero cree que el apoyo europeo a la inversión significa que la red europea portuaria «tiene muy en cuenta a Cantabria» a la hora de planificar el futuro del transporte marítimo y advierte que «no podemos perder la oportunidad de acompañar esas inversiones con un decidido apoyo a la creación de infraestructuras logísticas en Cantabria que favorezcan la actividad del puerto cántabro