Si no se presentan contratiempos de de última hora, el Servicio Marítimo de la Guardia Civil (SEMAR) dará recepción a su nuevo y mayor buque en apenas dos semanas, ya que está previsto que sea botado en la primera quincena de octubre.
En este caso, y siguiendo su filosofía de bautizar sus embarcaciones con nombres de ríos del país, este nuevo barco, el de mayor eslora construido hasta la fecha, tendrá el nombre de un río de la provincia de Burgos, Arlanza.
Con 35 metros, se convertirá en el de mayor eslora, por encima de las patrulleras de la clase Guardamar, más del tipo guardacostas, y además es la embarcación más innovadora de la flota del Semar, ya que contará con un sistema de propulsión híbrido diésel y eléctrico.
Actualmente está viéndose sometido los últimos remates antes de tocar por primera vez el mar, algo previsto para las próximas semanas en Burela (Lugo), aunque antes, se llevará a cabo una presentación oficial que bien podría ser realizada en el mismo puerto algecireño – casi con toda seguridad a finales de noviembre -donde tendrá su base, ya que pasará a formar parte del grupo marítimo del Estrecho, aunque para entonces ya habrá sido recepcionado por el SEMAR en Barcelona.