El viaje inaugural del Sleipnir, el buque semisumergible más grande del mundo, ha dejado huella tras su paso por aguas de la Bahía de Algeciras. Aunque finalmente, como adelantó EL ESTRECHO DIGITAL, no pudo ser atendido por empresas españolas, sí que recibió el mayor suministro de bunkering de Gas Natural Licuado (GNL) que hasta ahora se había llevado a cabo en Europa.
En total fueron suministradas casi 3.200 toneladas a los ocho depósitos con los que cuenta esta plataforma, en una operative llevada a cabo por la empresa Titan LNG. El buque estuvo anclado en el lado oeste de Gibraltar desde el viernes 23 de agosto tras haber salido de Singapur el 5 de julio, recién botado. Es una impresionante estructura con una eslora total de 220 metros, una manga de 102 metros y un tonelaje bruto total de 187.987 toneladas. El buque alberga a 155 tripulantes y 102 pasajeros.
Mientras estuvo fondeado junto a Gibraltar, el Sleipnir llevó a cabo una serie de operaciones, que incluyeron cambios de tripulación, repuestos, almacenes y abastecimiento de combustible. El gas fue suministrado por el buque de GNL Coral Fraseri, propiedad de Titan LNG, que llegó específicamente para entregárselo al Sleipnir.
Ya el jueves por la tarde, el Sleipnir partió con destino a Israel.
La operación de aprovisionamiento de GNL sólo se permitió después de que el personal clave de ambos buques se reuniera con un equipo de la Autoridad Portuaria de Gibraltar (GPA) formado por el capitán del Puerto, su adjunto, sus oficiales superiores, el superintendente de aprovisionamiento y los prácticos. La reunión, que se celebró en la oficina del puerto, tenía el objetivo de garantizar que se habían establecido todos los protocolos de seguridad pertinentes y que se cumplían todos los criterios de la GPA.
El capitán del Puerto expresó su satisfacción por la forma en que se había llevado a cabo la operación y destacó que el Puerto de Gibraltar había demostrado, una vez más, que era un líder de la industria marítima. El ministro encargado de los Asuntos Portuarios y Marítimos, Gilbert Licudi, se mostró muy satisfecho con la forma en que se había llevado a cabo la operación y expresó su esperanza de que este fuera el comienzo de una actividad regular de aprovisionamiento de gas natural licuado en aguas gibraltareñas.
Niels den Nijs, CEO de Titan LNG, comentó: «agradecemos al Puerto de Gibraltar su apoyo y estamos orgullosos de nuestro equipo de aprovisionamiento barco a barco y de la tripulación a bordo del Coral Fraseri. La operación se llevó a cabo en la bahía protegida, lo que ayudó a que la operación fuera segura, eficiente y sin contratiempos. Agradecemos a Heerema su confianza y cooperación, que hicieron de esta operación un éxito en Gibraltar. Esperamos poder suministrar a Heerema más GNL en el futuro para cumplir la misión de Titan de reducir las emisiones nocivas del sector marítimo e industrial».
Una pena para las empresas de la Bahía de Algeciras, que son las generadoras de recursos y bienestar para los ciudadanos.