Repsol ha impulsado su apuesta por el uso del gas natural licuado (GNL) como combustible marítimo con la firma de un acuerdo con Brittany Ferries para abastecer a sus buques en España mediante la instalación en los dos puertos españoles donde opera la naviera, Santander y Bilbao, de sendos tanques de 1.000 metros cúbicos cada uno, que se irán rellenando con camiones cisterna para surtir periódicamente a los buques.
Estos dos tanques se irán rellenando a través de camiones cisterna y Repsol «desarrollará un almacenamiento intermedio para garantizar el suministro», según ha detallado la directora de comercialización mayorista de GNL, Laura Rejón Pérez.
Repsol ha llegado a un acuerdo recientemente con Brittany Ferries para abastecer a sus buques en España y parte de su flota cubrirá desde 2022 la ruta entre Reino Unido y el norte de España con barcos propulsados a GNL.
Con este acuerdo la compañía española espera impulsar su servicio de suministro de combustibles marítimos, que desde 2014 ha suministrado más de 3.500 metros cúbicos de este combustible a 16 buques.
En la actualidad, España dispone de 6 plantas operativas de GNL distribuidas por su costa y su transporte, que se efectúa a una temperatura de -160°C, para disminuir su volumen unas 600 veces con respecto a su estado gaseoso, lo que posibilita su transporte por mar y su almacenamiento en las plantas de regasificación, ha detallado Repsol.
Entre los hitos de este tipo de operaciones la empresa española ha destacado el suministro realizado en diciembre pasado en el puerto de Cartagena en el que transfirió 430 metros cúbicos de este combustible a un barco petrolero.
Según los datos de Gasnam (Asociación Ibérica del Gas Natural para la Movilidad), la flota de buques propulsados por GNL en todo el mundo crecerá un 87 % hasta alcanzar los 254 en 2020, frente a los 136 barcos que estaban navegando en 2018.