El Colectivo Ornitológico Cigüeña negra y Verdemar Ecologistas en Acción ha denunciado la rocambolesca «aparición» del equipo de un kitesurfista en una vivienda de Palmones, tras colisionar la “cometa” contra la fachada de la casa.
La práctica de actividades deportivas como el kite en el Paraje Natural del Río Palmones es cada vez más frecuente en la zona, como consecuencia de los días de vientos fuertes del Este (Levante) cuando la práctica de este deporte es complicada en Tarifa.
Esta zona próxima al estuario del río Palmones, recuerdan los ecologistas, «es Lugar de Interés comunitario (LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA)”,
Esta zona próxima al estuario del río Palmones, recuerdan los ecologistas, «es Lugar de Interés comunitario (LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA)”, siendo habitual tanto la entrada de deportistas que practican este deporte que vienen a espantar a todas las aves que permanecen en la zona cuando su índole de protección ambiental es precisamente por las aves que allí se encuentran. Por otro lado la invasión de la pequeña playa de Palmones (Los Barrios) o Rinconcillo (Algeciras) supone todo un riesgo para los usuarios e incluso para los vecinos como ha quedado demostrado, según los conservacionistas con lo ocurrido en esta ocasión.
Para Cigüeña Negra y Verdemar resulta «incomprensible que se permita tan descaradamente por parte de la Administración competente, que se realice esta práctica deportiva que tanto impacto tiene para las aves, el entorno y las personas”, porque «en los días de Levante fuerte en Tarifa, los deportistas salen para buscar aguas más acordes para esta actividad y deberían ser más consecuentes y sensibles con el medioambiente que les rodea”. “El impacto reiterado produce una alteración muy grave a las aves, que por molestias y seguridad se desplazarán a otras zonas más lejanas», señalan.
Por otro lado ambas asociaciones ambientales vienen solicitando desde hace años a las distintas Federaciones de Vela (Andaluza y Española) de manera urgente procedan a la regularización de esta práctica mediante la matriculación de las cometas usadas en este deporte, lo cual ayudaría a las autoridades competente a identificar perfectamente a los deportistas que realizan una mala praxis de este deporte como puede ser la práctica del mismo en espacios protegidos o en zonas no autorizadas para ello.