El puerto de Algeciras participa, esta semana, junto a una treintena de empresas, en el primer encuentro empresarial España-China que se celebra en Shenzhen, con el objetivo de facilitar a las empresas nuevas oportunidades de inversión en este país asiático. El ICEX y la Oficina Económica y Comercial de España en Cantón organizan este foro de debate, en el que las más de 30 empresas españolas que han viajado al país asiático se entrevistarán con alrededor de 70 firmas locales, manteniendo 120 ruedas de negocio.
A través de este encuentro se podrán identificar oportunidades de negocio gracias a un mayor conocimiento del mercado de destino y de las oportunidades de inversión y cooperación empresarial existentes
A través de este encuentro se podrán identificar oportunidades de negocio gracias a un mayor conocimiento del mercado de destino y de las oportunidades de inversión y cooperación empresarial existentes en los sectores concurrentes: agroalimentario, automoción y seguridad vial, bienes de consumo, biotecnología y sanidad, educación, medio ambiente y smart cities, sector industrial, servicios a empresas -consultoría, e-commerce y servicios financieros-, transporte y logística, robótica y deportes.
Shenzhen tiene una población que ronda los 12,5 millones de residentes y es una de las cuatro ciudades más desarrolladas de China, tras Pekín, Shanghái y Cantón, así como el principal polo tecnológico y financiero del sur de China. Está localizada en la Provincia de Guangdong, que posee la mayor población y PIB de China -con un PIB similar al de Australia-, atrayendo el 25% de los flujos de inversión extranjera de toda China.
Con un crecimiento medio del 25% en los últimos 30 años, ha pasado de ser un pequeño pueblo de pescadores a una de las ciudades más dinámicas de China. En 2017, el PIB de Shenzhen fue de 2,24 billones de RMB (unos 300.000 millones de euros, similar al de Sudáfrica) y superó por primera vez al de Cantón y Hong Kong (2,15 billones de RMB, unos 280.000 millones de euros). El 40% de su PIB es generado por empresas relacionadas con la innovación, en sectores como la biotecnología, las energías alternativas, internet y la tecnología. Asimismo, el 58,6% de su PIB proviene del sector terciario.
Esta ciudad se conoce en el mundo como el “Silicon Valley de Asia” y ha superado a Pekín para convertirse en el principal centro de innovación y emprendimiento del país. Desde 2013 lleva invirtiendo en I+D más del 4% de su PIB, el doble que la media del país (el 90% por empresas privadas) y ha desarrollado un completo ecosistema que lo ha convertido en uno de los principales centros tecnológicos del mundo en el que conviven grandes empresas tecnológicas con start-ups.