El puerto de Algeciras ha sido escenario de un simulacro de emergencia por enfermedad infecciosa, organizado por la Fuerza de Acción Marítima de la Armada y la Subdirección General de Sanidad Exterior (SGSE) del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, en colaboración con la Delegación del Gobierno de la Junta en Cádiz, la Autoridad Portuaria y el Ayuntamiento de la ciudad. El ejercicio ha permitido verificar los protocolos de actuación ante este tipo de alertas de salud pública y ha permitido avanzar en la coordinación de los operativos para estar preparados ante posibles casos reales.
El simulacro ha estado enmarcado en el programa conjunto de seguridad marítima denominado MARSEC-19. ha servido para poner a prueba los mecanismos de emergencia y repuesta pero también los de protección a la población ante situaciones de alerta de salud pública que son esenciales para estar preparados ante posibles casos reales.
El simulacro ha servido para poner a prueba los mecanismos de emergencia y repuesta pero también los de protección a la población ante situaciones de alerta de salud pública
La emergencia simulada ha comenzado a las 06.00 horas de la madrugada, momento en el que el capitán de un buque de bandera española, procedente de Nigeria con quince tripulantes a bordo, ha comunicado a la estación costera su llegada al puerto de Algeciras con un cadáver y una persona enferma con sospecha de padecer fiebre hemorrágica, una enfermedad transmisible que pudiera suponer un riesgo para la salud pública. De inmediato se han puesto en marcha todos los mecanismos de emergencia para asistir al accidentado y prevenir la transmisión de la enfermedad en el territorio nacional.
La Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras, una vez recibida la alerta de la embarcación, ha activado el Plan de Emergencia Interior del Puerto y ha dado aviso al 112 de la situación, que ha comunicado el incidente a los servicios de emergencia estatales y locales, así como a efectivos de de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, Cruz Roja Española, Policía Portuaria, Guardia Civil, Cuerpo Nacional de Policía y al responsable de Alertas de Salud Pública de la comunidad autónoma.
Una vez constituido el gabinete de crisis, se ha procedido al montaje del Puesto de Mando Avanzado (PMA), desde donde se ha coordinado la gestión de la emergencia, dirigida por el coordinador provincial de Gestión de Emergencias y director operativo del 112 en la provincia. Tras la autorización de la llegada del buque al puerto, un equipo sanitario ha realizado la primera inspección y Sanidad Exterior ha autorizado el desembarco del enfermo, evacuado por la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES) y trasladado al hospital de referencia en condiciones de bioseguridad.
El ejercicio ha ensayado también la participación del juez de guardia y el médico forense para el desembarco del cadáver, la revisión epidemiológica y vigilancia tanto de todos los miembros de la tripulación, como del personal operativo que ha participado en las labores de asistencia y evacuación del enfermo y el cadáver. El (PMA), asimismo, se ha encargado de dar aviso a la empresa especializada en limpieza y desinfección de los contenedores de residuos biológicos y del resto de material potencialmente contaminado.
El MARSEC -19, tal y como establece la legislación, ha servido para poner a prueba la eficacia de los mecanismos establecidos, los protocolos dispuestos, la capacitación del personal y la disponibilidad de los medios en caso de emergencia de salud pública para testar la capacidad de respuesta en los puntos de entrada marítimo.
Más de medio centenar de efectivos han participado en este simulacro, en el que el Grupo de Emergencias de Andalucía (GREA) ha desplegado un Puesto de Mando Avanzado en la dársena del puerto que se ha constituido como cerebro de la emergencia y centro neurálgico de la actuación en el lugar del incidente, al contar con la participación de todos los intervinientes. Para ello ha dispuesto de una amplia infraestructura que ha dado soporte a las actuaciones de análisis y seguimiento, además de conexión directa con la sala regional y provincial de 112.
Durante la realización del ejercicio se ha comprobado la activación de los operativos y organismos, la movilización de los medios y la comunicación entre la estructura del plan. Se ha evaluado la operatividad de cada uno de los servicios participantes, la comunicación interna de las estructuras de coordinación, los tiempos de despliegue de estructuras y las medidas de protección.
Una vez concluido el ejercicio, se ha abierto una fase final de evaluación para elaborar un análisis de las actuaciones llevadas a cabo por todos los operativos intervinientes y extraer, posteriormente, unas conclusiones que ayuden a la preparación y formación de los operativos en caso de emergencia real.