Una ballena que fue encontrada muerta varada en una playa en el sureste de Filipinas tenía 40 kilos de plástico en el estómago, bolsas de supermercado, sacos de arroz, grandes envoltorios de plátanos, etc.
El animal fue observado flotando en el agua por unos vecinos que alerta a los servicios de rescate. Darrell Blatchley, fundador y presidente del museo de historia natural D’ Bone Collector, en Davao, acudió a la llamada pero no pudo hacer nada por salvar su vida. El cetáceo, de la especie zifio o ballenato de Cuvier, apareció el viernes en la orilla del mar del municipio de Mabini, en la provincia de Valle Compostela, y se le sometió a una autopsia el domingo.
Entre los artículos que se hallaron dentro del estómago, figuran 16 sacos de arroz, una lona de plástico utilizada en las plantaciones de banano y bolsas de la compra. Blatchley explicó que en los diez años que lleva examinando ballenas y delfines muertos, la mayoría murieron por culpa de la basura plástica ingerida.
Se trata de la mayor cantidad de plástico encontrada en una necropsia realizada en ese centro a una ballena, que ingieren erróneamente el plástico que hay en el mar pensando que se trata de comida, explicaron.
Filipinas está considerado como uno de los países más afectados por el vertido incontrolado y acumulación de plásticos en el mar. Diversas organizaciones locales e internacionales han reclamado reiteradamente al gobierno de Filipinas acciones decididas para frenar los vertidos y poner en marcha operaciones de limpieza de las aguas