Durante los últimos días ha llamado la atención en el muelle Isla Verde la presencia de un buque de características peculiares que nada tienen que ver con las que habitualmente encontramos en aguas de la dársena algecireña.
Se trata del Geo Coral, un buque de bandera noruega, construido en el año 2010, de 108 metros de eslora por 24 de manga, que está destinado a la investigación sísmica, sometiendo a estudio las mejores zonas para perforar en busca de petróleo en alta mar, utilizando una avanzada tecnología que está ligada a la transmisión controlada de energía acústica.
Además del estudio de los mejores fondos para la perforación en busca de petróleo, este tipo de buques sísmicos se utilizan para el estudio de la geología de los fondos marinos, incluyendo la formación de rocas o estudios sobre las fallas oceánicas.
El objetivo de sus estudios, además de proporcionar asesoramiento para fines relacionados con la industria del petróleo y gas, también pueden desvelar pesquisas claves para la industria de la minería y la industria de la construcción.
Uno de sus últimos proyectos se ha llevado a cabo recientemente en Australia Occidental, durante tres meses y que concluían a mediados del pasado mes de enero.
En el puerto de Algeciras recalaba el pasado lunes al filo de las dos de la tarde, tras un largo desplazamiento desde Singapur, pasando por Malasia y Malta.