El Ministerio de Fomento ha comunicado a la Comisión Europea la aplicación de la reserva de bandera española a las actividades portuarias de remolque y amarre para garantizar las condiciones laborales en ambos sectores del ámbito portuario.
Esto supone una limitación para que sólo buques registrados en España pueden acceder a servicios como remolque y amarre que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) puso en entredicho el pasado diciembre, lo que llevó al colectivo de remolcadores a anunciar una posible huelga si el Gobierno no aplicaba esta garantía laboral.
Esta decisión no obstante, no supone que estos servicios de remolque y amarre puedan ser prestados por operadores de otros países de la Unión Europea que cumplan con las condiciones de los pliegos particulares, incluida la de matricular los buques en el registro español, para ofrecer sus servicios en los puertos españoles.
Fomento establece, por tanto, el requisito de enarbolar pabellón español a las embarcaciones que prestan los servicios de remolque y amarre, protegiendo la actividad de las tripulaciones de las embarcaciones que prestan estos servicios.
Lo que opino es que lo que tiene que hacer el gobierno junto con capitanías y autoridades portuarias es que se cumpla con la jornada laboral para que si viene cualquier empresa la tenga que cumplir también y así haya una competencia sana