El coordinador general de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de los Puertos, Miguel Ángel Hormigo, considera que el preacuerdo alcanzado a principios de octubre por CCOO y UGT en la mesa negociadora del III Convenio para Puertos del Estado y Autoridades Portuarias genera “una situación muy grave por diversos motivos”.
Según el responsable de Coordinadora, el texto del que será próximo convenio, por ocho años, para los trabajadores de las autoridades portuarias “no recoge las peticiones de los trabajadores, vulnera el derecho a la libertad sindical y ni siquiera refleja las tablas salariales”.
“El preacuerdo no refleja tablas salariales y, por lo que hemos podido saber, de manera extraoficial, se baraja que las subidas de sueldo anuales no contemplen ni el IPC”
A principios de octubre, lo días 3 y 4, se reunió la mesa negociadora del III Convenio para Puertos del Estado (OPPE) y Autoridades Portuarias (AAPP), en la que CCOO y UGT, por la parte social, firmaron el mencionado preacuerdo, y ahora, Miguel Ángel Hormigo considera que “vulnera la libertad sindical porque, entre otras cosas, obliga a que los firmantes del mismo estén presentes en todos los acuerdos de empresa, tengan o no representación sindical”. Un gesto sintomático, según Coordinadora, que no parece perseguir el bienestar laboral de los trabajadores.
“Después de nueve años, desde 2009, de acumular pérdidas en el poder adquisitivo de los trabajadores, ejercicio tras ejercicio, confiábamos en lograr un acuerdo que, de manera clara y explícita, frenara estas mermas”, señala Hormigo, quien afirma que “lo único que hemos logrado es que el preacuerdo refleje las subidas para el funcionariado y personal de Administraciones Públicas ya pactadas, en marzo de 2018, con el Gobierno central y que están publicadas en la Ley de Presupuestos Generales del Estado”.
El portavoz de Coordinadora asevera que, el texto actual no despeja las dudas sobre los salarios, pues “el preacuerdo no refleja tablas salariales y, por lo que hemos podido saber, de manera extraoficial, se baraja que las subidas de sueldo anuales no contemplen ni el IPC”. Además, “la mayoría de las reivindicaciones de los trabajadores no aparece en este convenio”, como la recuperación del importe del 5% o en su defecto la no aplicación real de éste.
Por el contrario, «este convenio directamente elimina el concepto de la nómina haciéndolo irrecuperable; tener prejubilaciones parciales no condicionadas a la organización empresarial y presupuestaria; negociar un coeficiente reductor para los trabajadores que realicen sus tareas enrolados; garantizar la prestación de servicios en gestiones directas y no seguir privatizándolos (servicios de información al pasajero, inspección de equipajes, electricidad, pasarelas, sistemas informáticos, accesos, etc); reducción horaria para el personal no sometido a turnos en periodos de verano, Semana Santa y Navidad; participación de los diferentes sindicatos con representación en la Autoridades Portuarias en la actualización del reglamento de policía y explotación; entre otras, explica Hormigo, quien concluye que “se trata de un convenio que nos hipotecará durante ocho años y no responde a las demandas de los trabajadores, quienes lo han firmado no están representando nuestros intereses que se supone que es para lo que han sido votados”, concluye.