La Autoridad Portuaria de Valencia ha adjudicado a la empresa Dragados S.A. el contrato para la “Redacción de proyecto, obras y conservación del nuevo Centro de Inspección Fronteriza (CIF) del puerto de Sagunto» por un importe de 4.016.905 € y un plazo de ejecución total de 58 meses.
El contrato de adjudicación contempla un período de dos meses – a partir de septiembre – para la redacción del proyecto, ocho meses para la realización de las obras y 48 (prorrogables hasta un máximo de 24 meses más) de mantenimiento y conservación de las instalaciones.
Teniendo en cuenta los tiempos necesarios de aprobación y revisión del proyecto que presente la empresa adjudicataria del trabajo, la construcción del Centro de Inspección Fronteriza del puerto de Sagunto podría estar concluida a finales del próximo verano. Durante la segunda mitad del año 2019 se procedería a la instalación del mobiliario y de los diversos equipamientos, para poder comenzar a operar a finales del ejercicio.
La construcción del Centro de Inspección Fronteriza del puerto de Sagunto es fruto de la puesta en marcha de la Terminal Polivalente en el Muelle Norte de la dársena 2 del puerto, especialmente por los tráficos marítimos de importación esperados, lo que permitirá dotar las instalaciones saguntinas de los servicios de inspección más completos; lo que sin duda supone un salto cuantitativo y cualitativo de las prestaciones y potencialidades del puerto de Sagunto.
La parcela donde se proyectarán las nuevas instalaciones tiene una superficie de 31.200 m2 y se sitúa en el interior del recinto portuario, a unos 300 m al sur del control de acceso al puerto de Sagunto. Limita al norte con la rotonda R2 y el vial que conecta las rotondas R2 y R3, al este y al sur con la infraestructura ferroviaria, y al oeste con un vial (ver imagen adjunta).
El recinto es sensiblemente rectangular con orientación noreste-suroeste, está pavimentado debido a su uso anterior como depósito de contenedores y cuenta con un acceso viario desde el vial situado al oeste.
El uso básico al que será destinado el edificio es el de inspección de mercancías. A tal efecto, el edificio se organizará en dos grandes áreas, por un lado el área de uso administrativo, orientada hacia la zona de acceso a la parcela, y, por otro, el área de inspección de mercancías, vinculada al aparcamiento de vehículos pesados.
La planta del edificio será alargada, aunque quebrada en su zona media, articulándose en este quiebro la zona de acceso y recepción. El programa de necesidades se desarrolla del siguiente modo:
– Área de Uso Administrativo. Compuesta por: zona de recepción y acceso, circulaciones, aseos y archivos, despachos para los inspectores, despacho de dirección, una oficina diáfana, una zona de descanso de personal, cuartos de instalaciones y vestuarios generales.
– Área de Inspección de Mercancías. Ésta, a su vez, está subdividida en 5 bloques correspondientes a cada uno de los servicios de inspección de mercancías que está previsto desarrollar. Estos cinco bloques se denominan:
o Productos de Origen Animal No Consumo Humano (P.O.A.N.C.H.)
o Productos de Origen Animal Consumo Humano (P.O.A.C.H.)
o Productos de Origen No Animal Consumo Humano (P.N.O.A.C.H.)
o Productos de Origen No Animal No Consumo Humano (P.N.O.A.N.C.H.)
o Flores y Maderas.
Cada bloque estará equipado con salas de recepción de mercancías, salas de inspección, almacenes y cámaras. Tendrán acceso desde el exterior apto para carretillas, así como bocas preparadas para la descarga de las mercancías de los camiones recayentes al área de aparcamiento de vehículos pesados. Por otro lado, el acceso peatonal a estas zonas desde el resto del edificio se hará a través de distribuidores y vestuarios, a fin de impedir la posible contaminación de muestras.
En total el área construida contará con 3.783 metros cuadrados: 1.296 m2 de uso administrativo, 1.875 para zonas de inspección y 612 superficies abiertas.
En el proyecto se ha tenido en cuenta lo establecido en la normativa autonómica y municipal con respecto a higiene, salud y protección del medioambiente, de tal forma que se alcancen condiciones aceptables de salubridad y estanqueidad en el ambiente interior del edificio y que éste no deteriore el medio ambiente en su entorno inmediato, garantizando una adecuada gestión de toda clase de residuos.
Igualmente, el proyecto se ajusta a lo establecido en DB-SUA, así como a la normativa autonómica y municipal en materia de accesibilidad, de tal forma que se permita a las personas con movilidad y comunicación reducidas el acceso y la circulación por el edificio.