A través de un comunicado, Maersk Container Industry San Antonio (MCIS) ha hecho oficial su decisión de cesar en sus operaciones de fabricar contenedores refirgerados en las instalaciones que se ubican en Malvilla. Sus razones: “sobreproducción de contenedores en el mundo, en combinación con la dificultad permanente para obtener, a nivel regional, los proveedores de insumos esenciales para la fabricación de contenedores”.
Se trata de una determinación que conlleva malas noticias para 1.200 trabajadores, que se han quedado sin ocupación laboral. «Recibirán un paquete de indemnización con una compensación adicional a lo que exige la ley”, expetó la empresa.
Por otra parte, MCIS explicó que los motivos del cierre de la fábrica se deben a la instalación en China de otras, llegando a siete en seis años, “lo que elevó la producción de contenedores”.
“Luego, el 90% de los insumos para esta industria deben importarse en Chile, lo que impedía a la empresa ser competitiva. Se suma a esto el largo tiempo de transporte de materia prima importada -de hasta cuatro meses- lo que no permitía a MCIS ser ágil y cumplir con las expectativas de respuesta de los clientes”, explicó.
Ronnie Jensen, gerente de MCIS, quiso dejar claro que «es una determinación necesaria, pero al mismo tiempo dolorosa. Y lamentamos profundamente los efectos que tiene para nuestros trabajadores y sus familias; muchos de ellos nos habían acompañado desde el inicio”.
“Estamos comprometidos con nuestras obligaciones contractuales y apreciamos el gran esfuerzo del equipo en estos seis años; primero en la construcción de la fábrica y luego en la fase de producción”, agregó Jensen.
Finalmente, la compañía agregó que el cierre del sitio de fabricación en San Antonio no afectará a ninguna de las demás actividades de A.P. Moller – Maersk en Chile.