La Generalitat y las cofradías de Blanes, Palamós, Roses, el Port de la Selva y Llançà han presentado un «acuerdo histórico» para que el sector cogestione, con apoyo del Govern y científicos, 500 km2 del litoral de Girona, para potenciar la preservación y el uso sostenible de los recursos pesqueros.
Es «una iniciativa de vanguardia en gestión sostenible en el Mediterráneo» y el Govern pretende apoyar que el propio sector regule el acceso y el esfuerzo de pesca en estas zonas con el asesoramiento de científicos, según un comunicado de la Conselleria de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación.
DOS AÑOS. El pacto es establecer, en diversos caladores pesqueros explotados por flotas de arrastre de diferentes cofradías gerundenses, una cogestión en que participen pescadores y científicos, y con apoyo de la administración pública.
Este acuerdo da a estas áreas una vigencia inicial de dos años, y pronto se espera crear una Comisión Permanente de Seguimiento de cada área donde estén representados al menos el sector pesquero, la administración y el mundo científico.
Las «zonas vedadas/cogestionadas» de la provincia y sus objetivos son: Regeneración de hábitat de Blanes-Palamós, Gestión de la cigala Roses-Palamós, Gestión de la merluza de Roses, Gestión de la gamba de Palamós y Gestión de la gamba del Cap de Creus.