El buque oceanográfico Miguel Oliver, de la Secretaría General de Pesca, participa en una nueva edición de la campaña ARSA para la evaluación de los recursos pesqueros y la caracterización del medio marítimo del Golfo de Cádiz, con la coordinación científica del Instituto Español de Oceanografía.
Desde su salida del Puerto de Cádiz, el pasado día 19, y durante 14 días antes de su regreso al mismo puerto, se realizarán estudios para obtener datos de los índices de abundancia de las principales especies demersales de interés pesquero en el Golfo de Cádiz, para obtener datos de los índices de abundancia de los sus patrones de distribución geográfica y las características hidrográficas y sedimentológicas de la zona.
ARSA forma parte de las campañas de arrastre de fondo que se realizan en nuestro país, y que es uno de los principales métodos de estudio directo de las poblaciones pesqueras explotadas. De esta manera se obtiene datos independientes de la actividad pesquera, para la correcta gestión de las diferentes poblaciones de los caladeros.
La evaluación de los recursos pesqueros se realiza a partir de datos de índices de abundancia estratificados de las principales especies comerciales, con sus distribuciones de tallas y datos biológicos, tanto de peces como de crustáceos y moluscos.
A lo largo de la campaña, también se tomarán datos oceanográficos, así como datos de sedimento a través de un colector colocado en el arte para cada arrastre.
Las campañas oceanográfico-pesqueras en el Golfo de Cádiz se vienen desarrollando de forma sistemática, y en la actualidad están integradas en el Programa Nacional de Datos Básicos para la gestión sostenible de los recursos del mar, fin el que la Secretaría General de Pesca sigue invirtiendo esfuerzos mediante, en este caso, el desarrollo de campañas de investigación a bordo de sus buques oceanográficos.
La información obtenida en esta campaña, en análisis conjunto con la serie histórica de la misma, y con diferentes tipos de datos de la pesquería, es utilizada por los científicos en los correspondientes grupos de evaluación, de donde deben salir las recomendaciones para los gestores de la pesca. De esta manera, sector, científicos y administraciones pueden conseguir la explotación sostenible de las diferentes poblaciones.
OCEANOGRÁFICOS. El buque oceanográfico Miguel Oliver es junto con el Vizconde de Eza y el Emma Bardán uno de los tres buques de investigación pesquera y oceanográfica de la Secretaría General de Pesca. Se trata de un buque multidisciplinar de 70 metros de eslora y 12 de manga dotado de un equipamiento tecnológico puntero para la navegación e investigación pesquera y oceanográfica y cuenta con la calificación de buque ecológico y silencioso.
Esta excelente dotación permite poner a disposición de los científicos los medios más adecuados para los fines de la campaña, además de optimizar todo tipo de recursos en la búsqueda del objetivo común de aumentar el conocimiento de pesquerías importantes para la flota española.
A bordo de estos tres barcos y con la colaboración de Institutos Científicos el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente sigue apostando por la toma de decisiones de gestión en base a la mejor información científica disponible, tal y como establece la Política Pesquera Común.