La Comisión Mixta UE-Marruecos de Profesionales de Pesca, que el viernes pasado formalizó su constitución como sucesora de la creada en 2011 entre los profesionales de la pesca de España y Marruecos, ha alertado del perjuicio y el impacto negativo socioeconómico que tendría, para ambas partes, una resolución desfavorable del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) en relación con el actual protocolo de pesca entre la Unión Europea y el Reino de Marruecos, que sigue en vigor hasta el próximo 14 de julio, y sobre el que el TJUE previsiblemente se pronunciará este 27 de febrero.
La Comisión Mixta, reunida en Dakhla y con la participación de representantes del sector pesquero de España, Holanda, Alemania, Francia, Polonia y Lituania con intereses en el caladero marroquí, también ha subrayado que el acuerdo de pesca actual UE-Marruecos no sólo garantiza el respeto del derecho internacional y los derechos humanos, sino que ha sido y es beneficioso para ambas partes, y pide al TJUE que sea consecuente.
Igualmente, la Comisión Mixta quiere hacer saber que una resolución desfavorable tendría graves consecuencias en las relaciones entre Europa y Marruecos más allá del sector pesquero. Según la Comisión Mixta, una resolución desfavorable sólo serviría para menoscabar el impacto social, fruto de unas buenas relaciones entre el reino de Marruecos y Europa, así como el desarrollo económico que implica, tal como han constatado los miembros de la Comisión Mixta “in situ”, en la ciudad de Dakhla.
El acuerdo también afecta a las Islas Canarias que, por su condición de región ultra periférica de la UE (artículo 349 del TFUE), se benefician de unas consideraciones especiales en todos los acuerdos comerciales de la UE que les afecten.
En este sentido, la Comisión Mixta recuerda que el Acuerdo de Pesca (previo al protocolo) entró en vigor en febrero de 2007, un año antes del acceso de Marruecos al Estatuto Avanzado. Este Estatuto prevé, entre otros objetivos, la dinamización de la gestión pesquera en un marco de cooperación UE-Marruecos, que ha permitido a la Comisión Europea el seguimiento continuo de la aplicación del protocolo de pesca y la evaluación objeto del informe de la CE que confirma su aplicación estricta.
De acuerdo con dicho informe, cada euro invertido por la UE, en el marco del protocolo, genera 2,78€ de valor añadido para el sector pesquero comunitario. Y, como ha destacado la Comisión Mixta, también es altamente beneficioso para el sector pesquero marroquí. Este sector genera un 2% del PIB de Marruecos, con los productos pesqueros representando el 9% de sus exportaciones.
Los representantes de la Comisión Mixta matizan que, más allá de los beneficios económicos, el acuerdo también es positivo desde el punto de vista social y medioambiental, sin olvidar su influencia directa en el desarrollo, tanto de infraestructuras -portuarias, de procesado, almacenamiento y de transporte-, como de actividades científicas y tecnológicas dirigidas a garantizar la sostenibilidad de los recursos pesqueros de uno de los caladeros más saludables y productivos del planeta.
El actual protocolo (2014-2018) del acuerdo de pesca UE-Marruecos permite faenar en el caladero atlántico de Marruecos a un máximo de 126 barcos de pesca de la UE, 90 españoles. De esas 90 posibles licencias, España ha hecho uso en este periodo, de 67 licencias. En 2017, se usaron 49 licencias por parte de España: 32 por barcos andaluces, 12 canarios y 5 gallegos. Holanda, Lituania, Polonia y Alemania disponen, por su parte, de 18 licencias.
En Marruecos, el acuerdo, entre 2014 y 2018, ha generado 700 puestos de trabajo de tripulantes, 200 de ellos marroquíes en buques comunitarios y alrededor de 3.500 puestos de trabajo en tierra. Cabe recordar que, en estas regiones, la pesca supone 40.000 puestos de trabajo, sumando empleo directo e indirecto.
La contrapartida económica para la UE es 30 millones de euros al año, de los cuales 16 millones corresponden a los derechos de acceso y 14 millones al apoyo a la aplicación de la política sectorial de pesca de Marruecos. A ello hay que sumar la contribución de las empresas armadoras en concepto de posibilidades de pesca, con un montante evaluado de 10 millones de euros.
Del montante de la UE dirigido al apoyo sectorial, un 66% se ha destinado a las regiones administrativas marroquíes del sur de Dakhla-Oued Eddahab y Laâyoune-Sakia-El Hamra; incluida, por ejemplo, la nueva lonja de Dakhla, con una inversión de 2,7 millones de euros.
Respecto a las capturas, los barcos europeos pescan 83.000 toneladas al año, lo que supone el 5,6% de las capturas totales en la zona, por un valor 80 millones de euros. Las capturas de España bajo este acuerdo se sitúan en una media del 7% (7.314 toneladas) de especies de las distintas categorías. El resto de los países europeos que hacen uso del protocolo suman 75.686 toneladas (93%) de las capturas de pequeños pelágicos: sardina, caballa y jurel, principalmente.
Por su parte, la flota marroquí, con 20.000 unidades, suma el 87,9% de las capturas totales en sus aguas y el 6,5% restante es capturado por barcos rusos. Cabe resaltar que Marruecos mantiene también un acuerdo de pesca con Rusia para pequeños pelágicos, renegociado en 2016, así como con Japón, para el acceso de palangreros atuneros.